Los carmelitas cumplen, en este 2014, 90 años regentando el Santuario de El Henar, ya que la primera comunidad se estableció en 1924. Así lo recoge la revista del Santuario en su sección “Antena del Santuario” del número de los meses de septiembre-octubre de 2014.

La monja cuellarana Sor Martina Vázquez, Consejera General de las Hijas de la Caridad, inició los trámites en 1923 para que los padres de la Orden del Carmen comenzaran a instalarse en el Santuario procedentes de la Provincia Arago-Valenciana.

Desde entonces y hasta el momento son los encargados del cuidado espiritual y material del lugar, restaurándose así la Provincia Carmelita de Castilla, suprimida en 1834 por la Ley de Exclusión y Desamortización de Mendizábal, y convirtiéndose el Santuario en la Casa Madre del Carmelo Castellano.

El artículo publicado en la revista del Santuario, recuerda como en mayo de  1924 Monseñor Federico Tedeschini, autorizaba la fundación canónica del Santuario como casa religiosa y el 14 de septiembre de ese año, coincidiendo con la celebración de la Romería, se realizó la toma de posesión en presencia del Obispo de Segovia, Manuel de Castro. Al acto asistió la Comunidad al completo: 18 religiosos (6 sacerdotes, 9 estudiantes de teología y 3 hermanos. por aquel entonces las instalaciones no contaban con luz, ni agua corriente, ni teléfono, ni siquiera carretera que comunicara el recinto con otras localidades. Cuenta el artículo que sí había “muchísimo frio y soledad”, pero a pesar de todo ello la Comunidad lo aguantó. “El año lo llenaban con los estudios de Teología, las atenciones pastorales que los sacerdotes del entorno les pedían, y en buen tiempo atendían a los peregrinos y celebraban el culto”, señalan. La Comunidad roturó parte de las tierras de su propiedad y contaban con su huerta y se puso en marcha una tienda de recuerdos cuyos beneficios se sumaban a las limosnas de los fieles.

En 1931 se trasladó el teologado a la región valenciana, de donde procedían los estudiantes, y El Henar se convirtió en noviciado, porque casi todos los novicios eran castellanos.

Durante la guerra civil El Henar fue un lugar tranquilo, pero según señala el artículo, tres de los priores de la Comunidad fueron asesinados más ocho estudiantes de filosofía y teología cuando se dirigían a su tierra desde Onda (Castellón). Duros fueron también los años de la posguerra, en los que apuntan solo había en El Henar un religioso sacerdote y un hermano “y tenían que hacer milagros para buscar de comer y dar clases a un grupito de seminaristas que reunieron”.

En estos años se realizaron en el edificio obras de adecentamiento y habitabilidad. Se construyó el pórtico de la iglesia, se hizo el coro para el rezo de los religiosos, se retiraron las casas que había frente al Santuario, que se utilizaban para la romería y se pintó el interior de la iglesia.

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Imagen de la virgen de El Henar en procesión y al fondo el Santuario. |Foto: Gabriel Gómez|

Auge en el siglo XX

En 1933 se creó el boletín, que 80 años después sigue funcionando. En 1955 se publicaba la “Historia de la Virgen de El Henar” del Padre Manuel Mª Ibáñez y en 1958 el Papa Pío XII nombraba a la Virgen de El henar Patrona de las Resinas Españolas.

En los años 60 con la difusión del automóvil, las visitas y peregrinaciones se multiplicaron. La Comunidad amplió el horario de cultos y adecentó la pradera. En 1969 se restauró la imagen de la Virgen y en 1972, tras visitar todos los pueblos En los años 60 con la difusión del automóvil, las visitas y peregrinaciones se multiplicaronde la Comunidad de Villa y Tierra de Cuéllar, se coronó canónicamente la imagen de la Virgen. El acto se llevó a cabo en la pradera y contó con la asistencia de 50.000 fieles junto a autoridades locales y regionales. El acto fue concelebrado por cuatro obispos y 105 sacerdotes y religiosos,

En 1975 se llevó a cabo la firma del nuevo contrato con el Obispo de Segovia, Antonio Palenzuela, por el que se cedía a la Orden del Carmen el usufructo de los edificios y terrenos del Santuario por un periodo de 100 años. Entre 1979 y 1981 se realizó una reforma radical de la casa convento sufragada por las órdenes carmelitas. También se acondicionaron las plazas y aceras del edificio. Esa restauración, terminada en 1981, marcó un hito importantísimo según señalaba hace unos años el Padre Balbino Velasco, “porque muchas de las obras en el exterior se realizaron en vistas a la Romería”. Así, se mejoró el acceso al camarín de la Virgen en la parte trasera del Santuario, donde también se construyó un edificio amplio para cocheras y donde en la Romería se instaló una oficina para atención a los peregrinos y visitantes en sus demandas y encargos. Velasco relataba que en esos años “se fue también ganando la batalla de los puestos, de los feriantes… Desde la calzada inmediata al Santuario al paseo de la pradera, de allí a los campos de deportes y finalmente a terrenos del Ayuntamiento de Cuéllar, al que se transfirieron los derechos que tenían los religiosos”. Añadía que “se ganó también la batalla de las velas tradicionales que convertían el templo en una continua humareda. Se sustituyeron las velas por lamparillas eléctricas”.

En 1984 el Padre Miguel Arribas publicó la “Historia del Santuario de El Henar”.