Un momento del Foro del Agua celebrado en la sala Alfonsa de la Torre. | Foto: Gabriel Gómez |

Jesús García del Valle, director general de Aquona, fue el encargado de abrir el `Foro del Agua´ que acogió la sala cultural Alfons de la Torre,  organizado por El Norte de Castilla y Aquona. Habló de sostenibilidad y gestión del agua y centró su intervención en el agua de Cuéllar, un agua señaló es de calidad y destacó que se cuenta con unas instalaciones modernas como son las de la nueva potabilizadora. Una instalación que lleva 6 años funcionando para producir ese agua de calidad.

Del Valle señaló también que desde el mes de marzo está en uso la nueva depuradora de aguas residuales que permite verter el agua al rio en óptimas condiciones. Además señaló que los fangos de esta depuradora se utilizan para uso agrícola.

“El agua en sí es un alimento, el más controlado”, afirmó añadiendo que en Cuéllar se analizan más de 4.000 parámetros al año.

Olatz Izaola Jáuregui, diplomada en Nutrición Humana y Dietética y miembro investigador del Centro de Investigación de Endocrinología y Nutrición clínica de la Facultad de medicina de Valladolid, centró su ponencia en la importancia del agua. Afirmó que una persona puede estar hasta un mes sin comer pero solo entre 3 y 5 días sin ingerir líquido. Explicó que el cuerpo humano es en un 60-70 por ciento agua y apuntó que un feto es un 90 por ciento agua.

Izaola señaló la importancia del líquido para la supervivencia humana. Aseguró que los líquidos sirven para excretar toxinas y depurar el sistema circulatorio, el hepático y el renal. Asímismo señaló que el agua interviene en numerosas e imprescindibles funciones. Insistió en la necesidad de un balance hídrico entre el agua que entra al organismo y los líquidos que se excretan. Detalló que el agua entra con la bebida, los alimentos y gracias al agua metabólica. Y se elimina mediante sudor, la respiración, la orina y las heces.

Ese balance puede llegar a ser negativo para el cuerpo cuan éste elimina y no se repone, produciéndose la deshidratación “pérdida de exceso de agua y sales minerales de nuestro organismo”. Entre los síntomas apuntó dolor de cabeza, mareos, calambres, fatiga y hasta la muerte.

En cuanto al consumo de agua señaló que debe ser de entre 2 y 2,5 litros diarios, lo que sería entre 6 y 8 vasos. El agua puede consumirse también en forma de caldos, infusiones, leche o alimentos.

“Este balance es primordial”, aseguró, destacando también que puede ser negativo, en lo que se conoce como una deshidratación, que se produce con una pérdida excesiva de agua y sales minerales del cuerpo. Por ello aconsejó que “hay que beber agua diariamente”, además de detallar los posibles niveles de deshidratación o algunos síntomas, para que los asistentes puedan detectarlo antes de que se complique el exceso de pérdida, especialmente en la población de riesgo, que se centra en los lactantes, la tercera edad, las embarazadas y los deportistas.

Recordó también que una ingesta excesiva de agua puede ser peligrosa para el organismo, afirmó se trata de una patología, la `potomanía´ que puede producir numerosos problemas de salud.