Nuevas instalaciones de la depuradora de Cuéllar. | Foto: Gabriel Gómez |

| El Consistorio ha presentado un recurso ante el  Tribunal Económico Administrativo de Castilla y León |


El Ayuntamiento de Cuéllar  hará frente a una sanción  de la Confederación Hidrográfica del Duero de 91.947,68 euros correspondiente al canon por los vertidos de la estación Depuradora de Aguas Residuales, EDAR, del municipio del año 2016. Una sanción para cuyo pago, junto a otras actuaciones, el pleno aprobó una modificación presupuestaria por suplemento de crédito por un importe total de 176.678,41 euros con cargo al remanente de tesorería para gastos generales y al superávit de 2017.

El alcalde de la villa, Jesús García, señaló que este canon de 2016 ha sido recurrido ante la Confederación y que han agotado todos los plazos para pagarlo y ahora lo hacen por vía ejecutiva. Apuntó también que la pasada semana se recurrió además ante el Tribunal Económico Administrativo de Castilla y León.

El Ayuntamiento disponía ya de una partida de 46.000 euros para hacer frente a este canon, teniendo en cuenta que en 2015 el importe pagado ascendió a unos 45.000 euros, aunque García afirmó que la cifra final les ha sorprendido y la consideran “excesiva”. Añadió también que está pendiente el pago del canon de 2017, un importe que a su juicio no les deben exigir y al que ya han presentado un recurso y alegaciones teniendo en cuenta los retrasos que ha sufrido la obra de la nueva depuradora por las modificaciones que ha requerido el proyecto. Una obra que debía haberse concluido en 2016 y cuyo retraso no es imputable al Consistorio sino a la propia Confederación por los retrasos de esas modificaciones.

Desde IU su portavoz, Alberto Castaño, se mostró consciente de que el canon había que pagarlo, si bien cuestionó “¿quién es el responsable de que el agua se vierta en condiciones no adecuadas?”. Señaló también la “diferencia brutal” entre el importe de 91.947 euros abonado y los 18.389 euros que  se deberían haber abonado si los parámetros del vertido fueran los marcados por la normativa europea. También cuestionó si la responsabilidad era de la Confederación por no haber construido antes la EDAR o si era del Ayuntamiento por no haber solicitado su construcción con suficiente antelación.

García le informó de que  llevan más de una década luchando con ese canon de vertido. También señaló las diversas reuniones mantenidas en estos años con la Confederación logrando que en anteriores años se minimizara el importe a pagar.

Desde el PSOE, Carlos Fraile, instó al Ayuntamiento a recurrir el canon “allá donde haya que recurrir” y cuestionó si la empresa concesionaria podría tener alguna responsabilidad. Así señaló que a su juicio y a la vista de las sanciones de 2015 y 2016 “parece que la gestión de la depuración no ha sido la más adecuada” teniendo como resultado el impacto ambiental en el rio Cega.

García afirmó que la empresa concesionaria, Aquona, no tiene responsabilidad ya que no disponían de los medios adecuados para que esos vertidos fueran los adecuados.