|Por Francisco Salamanca|Fotos Mario Pastor|

La caja redobla anunciando el cuarto de la tarde, un toro muy negro y cornalón que se desmocha en el burladero de cuadrillas, la expectación disminuye ante el accidente y se vuelve protesta cuando el toro se derrumba en el capote y en el caballo. Pañuelo verde, Víctor Barrio se refugia en el burladero mientras la cuadrilla se lamenta por lo bien que metía la cara el de Valdefresno. El sobrero de Hermanos Fraile Mazas con el mismo origen es más toro, yo diría que también más Lisardo, sale distraído y los primeros lances de capote no logran fijarle. En el caballo pelea en una vara fuerte con la cara por debajo del estribo, galopa en banderillas y el de Grajera le muestra la franela, le cita largo, dos series por el pitón derecho interminables, mano baja, el burel galopando, surge el toreo. Cuando el torero se echa la muleta a la mano izquierda la comunión con el tendido es total, los naturales se dibujan en la arena, largos, muy largos, otra serie con el estaquillador lamiendo los machos de la taleguilla y la plaza se entrega, no hacen falta explicaciones. Esta tarde Cantalejo ha vivido el sueño de toreros, ganaderos y aficionados, pocas veces pasa de forma tan completa.

Ficha de la corrida: Plaza de Toros de Cantalejo, con algo más de media entrada se lidiaron toros de Valdefresno, desiguales de presentación, anovillado el segundo y cornicorto el primero, el resto con trapío de salida suficiente que disminuyó según avanzaba la lidia al abrirse los pitones. El sobrero de Hnos. Fraile Mazas se le concedió la vuelta al ruedo.

Mano a mano entre Morenito de Aranda de tabaco y oro, que sustituía a Iván Fandiño que presentó certificado médico y Víctor Barrio, de grana y oro con cabos blancos. Actúo de sobresaliente Curro Ramírez.

Morenito de Aranda anda bien con los toros, se le nota el oficio, pero necesita material para el triunfo, ayer con el burraco que abría plaza intentó acompasar la floja y corta embestida desde los medios, pero el toro ya pedía aire en la segunda serie. Suerte contraria, estocada y oreja. Buenos lances con el capote al tercero, que se crece en varas, sacando el caballo al tercio, logra meterlo en la muleta a pesar del cabeceo incómodo de la embestida, pero se pone peligroso y le pasaporta tras pinchazo, estocada caída y descabello. Recibió un aviso y algunos pitos. El quinto sale suelto del capote y recibe en el caballo una vara caída que va a marcar toda la faena, perdiendo las manos de forma reiterada. Excelente la lidia de Luis Carlos Aranda en banderillas. Brinda a los ganaderos y lo intenta a media altura, pero el toro está muy tocado y el resultado artístico es nulo, tras un pinchazo logra una estocada desprendida que le vale un trofeo. Puerta grande.

Víctor Barrio poco pudo lucirse con su primero, el más pequeño del encierro, un toro deslucido, bruto y con la cara alta, por el que recibió algunos pitos después de tres pinchazos y una estocada muy caída. Con el que cerraba tarde, un toro muy basto, feote que brindó a su peña hizo empeño de enfermero tras las dos colosales volteretas que sufrió el astado al clavar los cuernos en el albero, algún muletazo suelto sin ligar y redondos. Mató mal y se silenció su labor. Con el cuarto bis se desquitó y toreo francamente bien, como ya he apuntado en el prólogo, aunque se emborrachó de toro alargando la faena y le costó cuadrar. Estocada desprendida. El presidente le concedió las dos orejas. Puerta Grande.