La cofradía del Niño de la Bola ha llevado a cabo, con sus propios fondos, la restauración de las andas en las que procesiona la imagen del niño cada 1 y 6 de enero. Mariví Postigo y Diana Martínez de la empresa Dammar conservación y restauración, han sido las encargadas de llevar a cabo los trabajos que han afectado principalmente a la parte inferior de las andas ya que la parte superior se encuentra en mejor estado. Esa parte superior únicamente se ha limpiado y barnizado. La parte inferior presentaba cera superficial, barniz oxidado y faltas de policromía y de preparación, según señalaron las restauradoras quienes también indicaron que anteriormente se habían llevado a cabo limpiezas inapropiadas en las que se habían llevado la preparación, la pintura… y en algunas zonas se había quedado la madera a la vista. Esas actuaciones había hecho que se perdiera casi la mitad de la superficie pintada del marmoleado sobre el que se coloca la imagen, estando el resto muy sucio. Los brazos de las andas habían perdido también parte de la pintura del uso y otras zonas tenían repintados bajo los que se encontraba oro que han decidido sacar a la vista como era en origen. Se han restaurado rellenando con yeso las grietas y se ha hecho una reintegración cromática imitando lo original, aunque dejando ver que se trata de una restauración. En las decoraciones de la parte inferior se han repuesto también algunas pequeñas piezas que se habían perdido, y en la parte de abajo donde ya se había tratado la carcoma se ha reforzado más con consolidante.

La base marmoleada se ha restaurado rellenando la grieta que se había producido con el peso el movimiento al procesionar con chuletas de madera y resina, cerrándolo para evitar más alteraciones.

Las restauradoras dedicaron una semana a efectuar los trabajos que llevaron a cabo en el centro parroquial de la villa.

Juan Carlos Llorente, hermano de la Cofradía, señaló que las andas son de principios del siglo XVII o principios del siglo XVIII, y recordó que el primer libro de la cofradía data de 1686 y las andas son algo posteriores. Señaló también que éstas concuerdan con el nuevo altar de San Esteban al que ya se dotó de una hornacina para tener la imagen del Niño de la Bola. Llorente destacó la delicadeza de las andas de estilo rococó “aquí lo llamaríamos churrigueresco”, afirmó. Llorente señaló que hace una década ya actuaron sobre las andas porque la carcoma era evidente y decidieron hacer un tratamiento, lo que ha permitidoque las andas hayan aguantado.

La cofradía acordó en su tradicional reunión del 6 de enero tras la procesión y dados los desperfectos que presentaban las andas pedir un presupuesto para la restauración que ahora se ha llevado a cabo y que ha tenido un coste aproximado de 1.000 euros.

“La cofradía está comprometida con mantener la devoción al Niño Jesús y todo lo que conlleva en navidades la liturgia en torno al Niño”, aseguró Llorente recordando que las procesiones del Niño son un hito del folclore religioso de Castilla. Reafirmó el objetivo de la cofradía de mantener y mejorar esta tradición para el municipio.

Por otro lado Llorente señaló que la Cofradía ha colaborado también con el ayuntamiento en la mejora de las campanas de San Esteban que ya pueden voltearse completamente, y no descartó que puedan actuar también sobre la imagen del niño que también presenta algún deterioro en el rostro