Planta de Biomasa de Cuéllar.

Planta de Biomasa de Cuéllar. | Foto: Gabriel Gómez |

La Comunidad de Vecinos San Sebastián renovará el contrato del suministro de energía calorífica generada por biomasa en la red municipal sumando así sus 64 usuarios a los 131 de las comunidades de Los Rosales, Los Claveles y Polideportivo 1 que lo renovaron la pasada semana.

En la mañana del domingo la cooperativa celebró una asamblea en la que el concejal, Luis Senovilla, expuso a los propietarios los términos de la oferta ratificada por las otras comunidades de vecinos. El edil apuntó que tras un debate en la votación determinaron aceptar la propuesta municipal. Ayer el presidente y el secretario de la comunidad San Sebastián se reunieron nuevamente con Senovilla para a lo largo de esta semana formalizar el nuevo contrato “y tramitar las cuatro comunidades conjuntamente para la instalación de contadores”, afirmó. Una instalación que se pretende llevar a cabo en el mes de septiembre y para la que desde el Ayuntamiento ya se ha hablado con Somacyl, la Sociedad Pública de Medio Ambiente de Castilla y León, que gestiona la planta y acometerá esos trabajos.

Senovilla señaló que los vecinos que se oponían a la renovación del contrato se decantaban por la instalación de calderas individuales en las viviendas, a lo que se sumaban ciertas reticencias por el aumento de precio que supone el nuevo contrato.

El edil señaló que de las comunidades que están actualmente conectadas a la red de biomasa únicamente la de Bartolomé de la Cueva, con cinco usuarios, queda por pronunciarse en torno a la renovación del contrato del servicio por un periodo de 15 años.

El nuevo contrato, modifica la anterior forma de pago, que estaba establecida en un fijo de consumo basada en los consumos históricos y que tenía como base el precio del gasóleo del día 2 de noviembre de cada año, a una nueva circunstancia, que tiene un término fijo para cada una de las comunidades, en función de los usuarios, para así contribuir a lo que Somacyl demanda al Ayuntamiento como canon fijo por producción de la energía calorífica, más un precio en base al consumo que cada una de las comunidades realice.

 

Reglamento

En cuanto a las viviendas unifamiliares que también están conectadas a la red de biomasa, Senovilla señaló que tendrán que pactar también con todos ellos un nuevo contrato “que igual que mantiene un fijo y un precio por consumo en las comunidades lo mantenga con ellos”, afirmó señalando que tendrían que ajustarlo y estudiarlo. Recordó que este servicio que el Ayuntamiento está dando a través de la planta de biomasa aún no tiene un reglamento aprobado al no haber fructificado el que propuso hace unos años, por lo que apuntó “estamos sin un documento general que regule y recoja todas las particularidades”.

Senovilla señaló que el reglamento es un paso que tendrán que dar para que todos los usuarios tengan unas mismas circunstancias y aseguró que “daría estabilidad jurídica a todos los que están conectados”.