La moción presentada por el PP de Olombrada en defensa de las diputaciones enfrentó al Equipo de Gobierno de ALIO y a la oposición del PP. El PP defendió la permanencia de la institución “para el buen funcionamiento de los servicios básicos, la financiación y cohesión de los pueblos medianos y pequeños del medio rural, facilitando la accesibilidad a los servicios básicos por parte de sus habitantes, eliminando así la clasificación de ciudadanos de 1ª y 2ª clase”.
Desde ALIO se manifestó que “en ningún momento se ha visto peligrar el papel de las Diputaciones” y en ese caso su opinión podría ser otra ya que la que manifestaron es “que queréis meter esta moción por interés partidista general, no particular de nuestros pueblos”.
Tras su exposición ALIO anunció su abstención a la moción” no vemos necesario su voto”, señalaron. Esa abstención permitió la aprobación de la moción con los votos favorables de los dos concejales del PP que asistieron al pleno, aunque el grupo de la oposición interpretó el rechazo de la misma por error.
“En ningún momento hemos estado contra de las diputaciones. Lo desmentimos categóricamente. Únicamente, y así viene reflejado, nos abstenemos de entrar en un juego puramente partidista entre los dos partidos mayoritarios de nuestro país”, afirman desde ALIO.
El Equipo de Gobierno anima al grupo municipal popular a dedicarse “a hacer una labor de oposición constructiva y educada. Sin menosprecios ni maledicencias”.
Efectivamente estas responsables de la oposición no se enteran mucho de como va la votación, pero más allá de esto lo peor son las formas, la falta de educación, el escaso interés real y búsqueda de información por los verdaderos problemas e inquietudes de los vecinos. Parece más bien que entienden la oposición como el ejercicio de poner cuantos más palos en las ruedas mejor, en vez hacer una oposición más sensata, sea de apoyo o de crítica cuando corresponda pero razonada y razonable.
Gracias a esta oposición, el pueblo de OLOMBRADA está en boca de todos por sus actitudes rastreras y sin sentido alguno.
Nunca una portavoz en la oposición, sea del partido que sea, ha hecho tanto daño. Solicitaría su dimisión inminente porque el pueblo no necesita controversia ni división. El pueblo no notaría su ausencia más que para las andanadas y pataletas que suele soltar contra el Equipo de Gobierno
La defensa de las diputaciones no ha generado ningún malentendido, cada grupo sabe si le parece una institución necesaria o no. Además, no creo que sea el tema más importante en estos momentos, ya que, por ahora, seguirán donde están. La única que genera mal rollo en el pueblo es la jefa de la oposición, que, por cierto, solo aparece por Olombrada para dividir a la población con su mezquina manera de entender la política municipal. Nunca una oposición en Olombrada fue tan destructiva.