| Foto: Gemma Obón |

La Matriz sigilar del Concejo de Cuéllar es la pieza del mes de julio del Museo Arqueológico Nacional, y puede visitarse todos los domingos del mes en su sede de la calle Serrano de Madrid. Los caballeros ocuparon un lugar destacado en la sociedad medieval, en la que la guerra fue un factor económico de primer orden, además de un medio para lograr el ascenso social. Para ser armado caballero, el aspirante debía reunir en su persona una serie de virtudes y habilidades, además del manejo de los caballos y las armas. En esta matriz, con la que el Concejo de Cuéllar sellaba sus documentos oficiales aparece representado un caballero, alférez de Cuéllar y vasallo del rey, con su armadura, su lanza y su escudo.

La Matriz datada entre los años 1284 y 1308 estrá realizada en bronce o hierro con una longitud se 135 milímetros y un diámetro de 90 milímetros. Estas grandes matrices sigilares, llamadas “de dos tablas”, producían sellos pendientes de plomo de dos caras y eran características de los concejos castellanos de finales del siglo XIII y del XIV. Estos sellos adquirieron gran importancia por ser considerados “auténticos” y estar a disposición del público para legalizar documentos privados mediante el pago de unas tasas. Por su enorme tamaño, se necesitaba una prensa, o tórculo, para elaborar el sello: la matriz de Cuéllar es la única que ha conservado su prensa original.