|Fotos Gabriel Gómez y Nuria Pascual|

Como cada año, el domingo anterior a San Mateo (21 de septiembre), la Virgen de El Henar festeja su tradicional Romería, que llena el recinto del Santuario de visitantes llegados desde toda la comarca cuellarana y desde diversos puntos de la geografía española, donde también se la profesa gran devoción.

Las misas y confesiones han dado comienzo a las 8 de la mañana y han continuado a lo largo de toda la jornada. A las 12.00 horas tuvo lugar la misa de campaña presidida por la imagen de la Virgen, muchos devotos han seguido este acto, la mayoría han acudido provistos de sus sillas y se han colocado a la sombra ya que ha sido una mañana de intenso calor. La homilía ha corrido, por segundo año consecutivo, a cargo del padre Luis Miguel García Palacios, Dominico de Palencia, quien este año ha sido también el encargado de predicar las novenas previas a la Romería. García ha animado a los asistentes a abrir sus corazones a la Virgen, a darla cabida “porque en nuestros corazones hay odio, hay codicia, porque en Las misas y confesiones han dado comienzo a las 8 de la mañana y han continuado a lo largo de toda la jornadanuestros corazones no hay lugar para el perdón y la reconciliación”, afirmó. “No podemos celebrar esta Romería de El Henar y ser un referente para tanta y tanta gente, a lo mejor gente que piensa que esto no tiene ningún sentido, vosotros hermanos sois los verdaderos testigos que dáis sentido a esta celebración”, manifestó. “No solamente podemos venir aquí a presentarle a nuestra madre nuestros problemas económicos, familiares, enfermedades, dolencias, nuestros seres queridos difuntos” apuntó, “no podemos hermanos venir aquí solamente como una romería, tenemos que venir aquí como verdaderos hijos de María de El Henar, con nuestras pequeñeces, con nuestros fallos, porque sabemos que bajo su manto cabemos todos, porque su manto es el símbolo del corazón”.  Algunos voluntarios se sumaron a los padres carmelitas para distribuir la comunión situándose en diferentes puntos de la pradera.

Tras la misa la imagen se ha colocado sobre su carroza al pie de las escalinata del templo y ha dado comienzo la procesión amenizada por la dulzaina y el tamboril del grupo A por Ellos. Aunque en general ha habido menos público en esta romería que en años anteriores, han sido muchos los que han acompañado a la imagen especialmente al inicio del recorrido que concluía pasadas las 15.00 horas con el canto de la Salve y la entrada de la virgen al templo bajo una gran ovación y la emoción de algunos de los presentes. Antes de su entrada, desde el interior del Santuario se instaba a los dulzaineros a tocar una pieza más en homenaje a todos los difuntos y los que no han podido acudir a este encuentro anual con la Virgen de El Henar.  Posteriormente la imagen ha sido colocada en su trono en el camarín donde los romeros han podido visitarla y besar su medalla durante el resto del día.

Puestos de venta

La zona de la Chopera, junto a la Fuente del Cirio, ha acogido durante toda la jornada “la otra romería” la protagonizada por los más de 240 puestos de venta ambulante que han contado con numerosos visitantes durante toda la jornada. De La zona de la Chopera, junto a la Fuente del Cirio, ha acogido durante toda la jornada “la otra romería”ellos más de la mitad se dedicaban a productos textiles y calzado, y el resto eran atracciones infantiles, heladerías, frutos secos, churrerías, herramientas, cerámica, juguetes, libros, artesanía andina, mimbre y bisutería. A ellos se sumaron los bares en los que degustar las tradicionales sardinas a la brasa. Este mercadillo volverá a instalarse el próximo domingo 21 de septiembre con motivo de El Henarillo. Sin duda los productos más típicos de la Romería de El Henar son las avellanas, que en ocasiones algunos romeros lanzan a la imagen de la virgen, y las sardinas a la brasa que especialmente se degustan en la noche del sábado y la jornada del domingo.

Como cada año la pradera del Santuario se fue ocupando desde primera hora de la mañana con las mesas y sillas de los romeros que llegaban dispuestos a disfrutar de la jornada en el recinto. Tras la misa éstos fueron completando los espacios hasta que la pradera se convirtió en un improvisado comedor. No solo la pradera se llenó de gente a la hora de comer sino también los pinares aledaños al Santuario donde se concentraron también grandes grupos de romeros.
La Policía Local de la villa con la ayuda de miembros de la Agrupación Local de Protección Civil y la Guardia Civil se encargaron de la seguridad en los accesos al recinto. Además los frailes del santuario contaron durante la jornada con voluntarios que colaboraron en el desarrollo de la procesión y en la organización de las personas que acceden al camarín a adorar a la Virgen.
Protección Civil instaló su tienda de primeros auxilios en los aledaños del puente junto a la pradera.