La temperatura, la lluvia y la nieve impiden a los alumnos recibir sus clases de Educación Física. |Foto: Gabriel Gómez|.
Con motivo del final del curso escolar, el Ampa del colegio La Villa organiza mañana la tradicional macarronada para los alumnos del colegio en los Paseos de San Francisco.
Este encuentro al que asistirán más de 160 niños de infantil y primaria, cuenta con la colaboración municipal para la infraestructura de tableros y sillas, y la participación de madres y padres que desde por la mañana se encargan de montar una gran mesa corrida donde aproximadamente 200 personas entre adultos y niños, celebran el final del curso escolar.
El Ampa en su constante reivindicación por que el colegio de La Villa disponga de la misma calidad educativa que el resto de centros escolares, quiere que el encuentro sirva para recordar a los políticos “su compromiso de dotar a nuestro colegio de un gimnasio que disponga de las mínimas condiciones para que los alumnos del mismo puedan recibir la asignatura de Educación Física durante todo el año, y que pueda servir de lugar de reunión del colegio, de profesores y alumnos”.
En el curso escolar que ahora acaba, según los datos recogidos por el Ampa durante todo el año escolar, no se ha podido impartir la asignatura de Educación Física el 22 por ciento de los días lectivos y hasta un 41 por ciento de los días se ha realizado en condiciones no idóneas (bajas o altas temperaturas, suelo mojado o helado…).
Con motivo de este encuentro se ha elaborado un pañuelo de color rojo donde se recogen los escudos de Cuéllar y del Ampa con una frase en grandes letras: “OTRO AÑO SIN GIMNASIO”. Confían en que este pañuelo pueda ser utilizado en las fiestas y que el mensaje llegue a más gente.
Desde el Ampa se va a enviar uno de estos pañuelos al Alcalde de Cuéllar, al Presidente de la Diputación, al Consejero de Educación y al Presidente de la Junta de Castilla y León, “invitándoles a nuestras fiestas y recordándoles de nuevo, el compromiso adquirido para esta infraestructura, con la esperanza de que los próximos presupuestos recojan el gasto”.
Sí, es una pena, pero como de todos es sabido: no hay dinero. Perdón, no hay dinero para el gimnasio. Hay dinero para muchas otras cosas: Cosas que benefician a unos pocos, pero esto que beneficia a un montón de chavales se quedará sin hacer. Total, los chicos que corran en la calle como se ha hecho toda la vida, que no les hace daño. UNA PENA