Directiva de la Comunidad de Villa y Tierra durante la Junta General. | Foto: Gabriel Gómez |

| Las cubiertas de las naves del polígono y la compra de un vehículo son las principales inversiones| 

El presupuesto de la Comunidad de Villa y Tierra de Cuéllar para 2021 asciende a 445.960 euros, tal y como fue aprobado por unanimidad en su Junta General por los representantes de los municipios que la forman. Un documento “nivelado” según señaló el interventor de la entidad, algo que ha permitido la eliminación de la regla del gasto.

El ingreso más importante que se prevé en 2021 procederá de las subastas de los aprovechamientos de los montes de la Comunidad de resina, madera y cinegéticos. Así se espera recaudar 287.803 euros, un importe que al no haber tasaciones de Medio Ambiente se ha calculado tomando como referencia la media de lo recaudado en los últimos cuatro años. Se calificó 2020 como un año “nefasto” en cuanto a  los aprovechamientos de maderas, ya que hay lotes que han quedado desiertos aún habiéndose licitado dos veces. Aunque en 2021 se espera que los ingresos sean mayores ya que  corresponde a la Comunidad los aprovechamientos del monte 180 cuya propiedad comparte con la Comunidad de Villa y Tierra de Sepúlveda.

Otra partida importante en los ingresos es la procedente del alquiler de las naves del polígono de Villa y Tierra que se cuantifican en 124.000 euros, el mismo importe que en 2020.

En cuanto a los gastos, el capítulo de gastos de personal recoge el aumento de un 0,9% en los sueldos del personal funcionario o laboral de la Comunidad, situándose en 176.000 euros. El presupuesto recoge también por primera vez una partida de acción social de 1.200 euros. Así también se incorpora como novedad una partida de 3.500 euros para contratar un seguro de responsabilidad civil para la Comunidad, ya que hasta ahora carecía de el.

Se destinarán 4.000 euros a la adquisición de material de bomberos, teniendo en cuenta que este año deben realizar la revisión de las bombonas de oxígeno y 5.000 euros para el pago del personal y los seguros sociales de los trabajadores de un nuevo programa mixto de formación y empleo.

Para el convenio de bomberos se recoge una partida de 57.000 euros y otra de 4.200 euros de subvención para Fundación Personas.

 

Inversiones

La Comunidad destinará 79.405 euros a inversiones, entre las que destacan 37.000 euros para la reparación de las cubiertas de naves del polígono y 27.000 euros para la adquisición de un vehículo. También destinarán 5.040 euros para realizar un proyecto de adecuación de naves, para estudiar sus carencias e ir adaptándose a la normativa industrial. Para la señalización de viales y aceras se destinan 1.895 euros, y 8.470 euros a maquinaria, instalaciones y utillajes para el servicio de bomberos de la comunidad.

 

Remanentes

El presidente de la Comunidad, Carlos Fraile, informó a los procuradores de que aunque la liquidación de este año para la Comunidad no será positiva, deben decidir a qué destinan unos 400.000 euros del remanente, por lo que les pidió propuestas.

En verdad el remanente asciende a más de un millón de euros, si bien el interventor informó de que apuntó que lo prudente es descontar lo que figura como pendiente de cobro y dejar también “un colchón” por si sucediera como este año cuando algunos lotes de maderas han quedado desiertos y la Comunidad precisara cubrir gastos. así señaló que ese importe debería equivaler al presupuesto del año.

Fraile señaló que se podría reservar un importe para la depuradora del polígono, una instalación para la que se está estudiando la posibilidad de enganchar directamente a la depuradora de Cuéllar.

Entre las propuestas que se realizaron figura el continuar con el arreglo de las cubiertas de las naves del polígono, iniciar la adaptación de las naves a la normativa industrial. También se propuso la compra de un carro de desatranques para las redes de los municipios que integran la Comunidad.

Además de sobre el uso de los remanentes se propuso abrir un periodo de propuestas para modificar los estatutos de la Comunidad para adaptarlos a la actualidad, ya que los existentes datan de 1989.