| Foto: Gabriel Gómez y Nuria Pascual |

Centenares de personas han acudido hoy al Santuario de El Henar para acompañar a la virgen en su procesión y mostrarle su devoción. Una procesión que de manera extraordinaria se celebraba hoy coincidiendo con la fiesta de El Henarillo, que tiene lugar de manera tradicional el domingo siguiente a la Romería de la Virgen. La lluvia obligó a posponer la procesión y el cielo cubierto ha acompañado hoy los actos. Así ha hecho que se decidiera oficiar la misa desde la escalinata de acceso al templo desde donde la imagen de la Virgen ha presidido la celebración.

Los fieles se han situado con sillas o de pie frente a la escalinata para seguir la misa que ha sido oficiada por el padre Florentino Bocos. En su homilia ha señalado como la Virgen “nos reúne en torno a la mesa de Cristo”. “A ella hemos acudido desde niños, porque nuestros padres nos enseñaron el camino”, ha dicho recordando como los niños acuden al camarín para visitarla. “Aprenden el camino y durante la vida queda impresa en su corazón esta devoción y la invocan a menudo”, ha asegurado. A ella, ha apuntado, “le pedimos su protección y la bendición para nuestras familias, para nuestra región, para nuestros pueblos, para nuestra patria y para el mundo entero que también lo necesita”.

Con vivas a la imagen ha concluido la misa y la virgen, en sus andas, ha sido colocada sobre su carroza que rápidamente ha sido rodeada por los devotos y ha dado comienzo la procesión que durante dos horas se ha desarrollado en torno a la pradera al son de la dulzaina y el tamboril del grupo `A por ellos´. Numerosos han sido los danzantes que han participado y que en esta ocasión han danzado de cara a la imagen durante todo el recorrido.

Al finalizar el recorrido ha caido una ligera lluvia que no ha impedido que con la imagen ya en la escalinata se bailara la jota final y se entonara la salve. Con vivas a la Virgen de El Henar y a la Morenita se ha despedido la imagen hasta el próximo año.

Tanto durante la mañana como por la tarde se han sucedido las misas y la virgen ha podido visitarse en su camarín.

Muchos de los asistentes se han quedado a comer en la pradera para alargar su presencia en el recinto y disfrutar de la jornada junto a familiares y amigos.

 

Venta ambulante

Nuevamente la zona de la chopera junto a la fuente del Cirio ha acogido los puestos de venta ambulante, menos numerosos que el día de la Romería. Artículos de ferretería y menaje, ropa y calzado, alimentación, productos para el hogar, alfombras, marroquinería, bolsos, joyería, frutos secos… han sido algunos de los que han podido adquirirse durante toda la jornada.

La policía local se ha encargado de la seguridad  en los puestos y en el acceso desde Cuéllar al recinto y ha contado con la ayuda de los voluntarios de la Agrupación de Protección Civil de Cuéllar que han instalado además junto al puente su tienda para atender posibles incidencias.