| Tras dos años sin poder salir a causa de la pandemia, la cofradía de la Vera Cruz ha procesionado por primera vez |

|Fotos: Gabriel Gómez |

El silencio, la sobriedad y la lluvia han sido los protagonistas de la procesión con la imagen del Cristo de la Encina. Una procesión que hoy se estrenaba, aunque fue en 2020 cuando se anunció junto con la creación de su cofradía, la de la Vera Cruz. La pandemia impidió que se desarrollara los dos años anteriores y este, por fin ha podido salir, aunque la lluvia ha empañado su tramo final.

La previsión de lluvia durante la tarde y coincidiendo con la hora del desfile, ponía de nuevo en jaque su desarrollo. Pero tras la misa en la iglesia de San Andrés, presidida por la imagen, y con el acompañamiento del sonido del órgano y la voz del contratenor Sergio Caminero, ha dado comienzo la procesión.

El sonido de los tambores de la cofradía de La Soledad ha resonado en el recorrido y ha marcado la salida de la imagen del templo acompañada por sus cofrades vestidos con trajes de lana del siglo XVI en paño marrón. Precediéndoles, representantes del resto de cofradías de la villa y tras ellos el público portando velas encendidas. Desde el templo el recorrido ha continuado por la calle Rogativa y la calle Nueva hasta pasar bajo el arco de la muralla, y dejando a un lado el Castillo continuar por la calle Palacio. Allí han comenzado a escucharse cantos tradicionales de los Catorce Romances de la Pasión de Cristo de Lope de Vega, unos cantos  típicos de esta época en la comarca y que aún se conservan en Chañe en su procesión de La Carrera en Jueves Santo. Los cantos han sonado de nuevo al atravesar el arco de San Martín acompañando el descenso de la imagen por la calle Duque de Alburquerque y Morería hacia la plaza Mayor.

Ha sido en el arco de San Martín cuando la lluvia ha comenzado a caer, y ya antes la imagen se había cubierto con plástico para protegerla. Desde ese punto la lluvia se ha intensificado y ha hecho que se desluciera el descenso por la calle Morería afeado por los paraguas y el plástico que recubría la imagen. Ya en la plaza Mayor la imagen ha sido conducida a la iglesia de San Miguel.

El párroco, Fernando Mateo, ha felicitado allí a la cofradía de la Vera Cruz por su trabajo y ha destacado el silencio y los momentos sobrecogedores que se han producido en el recorrido que se ha extendido durante una hora y cuarto.

El Cristo de la Encina, es una imagen del siglo XIII que forma parte del calvario que se conserva en la iglesia de San Andrés de la villa junto a las imágenes de la Virgen y San Juan. Se trata de un grupo artístico de gran  valor,  considerado como  una  de  las  mejores obras del patrimonio de la Iglesia en Castilla y León, y que presidió la exposición de Las Edades del Hombre en Valladolid en 1988, para la que fue restaurado, y pudo admirarse en la iglesia de San Andrés en la muestra de Las Edades que acogió la villa en 2017,  `Reconciliare´.