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La Dirección General de Tráfico (DGT) está impulsando un Plan Integral de Vigilancia en carretas secundarias, durante este mes de diciembre, coincidiendo con las fechas cercanas a Navidad, cuando se registra un importante aumento en los desplazamientos por carreteras y las condiciones meteorológicas pueden ser adversas.

La subdelegada del Gobierno, Pilar Sanz; el jefe provincial de Tráfico, Pedro Pastor; junto con el capitán del Subsector de Tráfico de la Guardia Civil, Jesús García Aller, han presentado hoy este plan a los medios de comunicación en una intervención que se ha desarrollado en la travesía de Revenga, en la N-603.

“El objetivo de esta campaña reside reducir los riesgos para evitar en lo posible accidentes en estas carreteras, que concentran el 80 por ciento de los siniestros en todo el territorio español”, señaló la subdelegada.

En este sentido, el plan contempla intensificar la vigilancia sobre los tres comportamientos que conllevan más riesgo, tanto por separado como unidos: la velocidad, el alcohol y las drogas.

De este modo, los agentes del Subsector de Tráfico de la Guardia Civil intensificarán sus controles de velocidad en las carreteras secundarias de la provincia, con radares móviles; si un conductor excede la velocidad permitida, y si los agentes lo consideran oportuno, realizarán controles de alcoholemia y drogas, así como la revisión de la documentación, para comprobar que el permiso de conducir, la ITV y el seguro del vehículo están en regla.

 Balance

En lo que va de año, en las carreteras de la provincia han perdido la vida 17 personas, nueve más que en el año anterior, en 16 accidentes, de los que nueve siniestros y diez muertes se registraron en carreteras convencionales.

Ante estos datos, la subdelegada del Gobierno pidió que “se extreme la prudencia frente al volante y se cumplan las normas de tráfico; es la mejor manera de evitar accidentes y desgracias personales y familiares”.

El número de siniestros en carretera en la provincia en lo que va de año asciende a 1.381, cifra de la que se desprende una disminución de 143 (un 9,3 por ciento menos). Los heridos graves suman 38, por los 54 de 2013 y los leves 322, frente a los 423 del año pasado.