Mañana se esperan chubascos y tormentas de mayor intensidad en el centro y oeste peninsular. | Foto: Gabriel Gómez |

La Agencia estatal de Meteorología, Aemet, advierte que a partir de hoy y sobre todo mañana domingo, con el acercamiento de una DANA (Depresión Aislada de Niveles Altos) desde el Atlántico y su posterior evolución se iniciará un cambio significativo del tiempo en amplias zonas de la Península, quedando al margen Baleares y Canarias.

Se espera una fuerte inestabilización de la atmósfera con chubascos y tormentas. Hoy afectarán al interior de la mitad oriental y áreas del noroeste, pudiendo ser localmente fuertes y con granizo, y el domingo se extenderán a buena parte del resto del interior peninsular, correspondiendo la mayor probabilidad de chubascos y tormentas de mayor intensidad a las zonas centro y oeste, especialmente en el oeste del Sistema Central y zonas próximas. Unido a esta situación de inestabilidad atmosférica se producirá un descenso significativo de las temperaturas en buena parte del interior peninsular, manteniéndose o con ligera tendencia a subir en zonas del litoral. Serán probables las rachas de viento fuertes y muy fuertes en zonas de tormenta.

Entre el lunes 28 y el miércoles 30 es bastante probable que la DANA se desplace hacia el suroeste peninsular y se mantenga casi estacionaria en la zona durante estos días, con precipitaciones que afectarán a buena parte de la Península, siendo más probables los chubascos y tormentas fuertes, e incluso muy fuertes, en el centro y sur, sobre todo en la mitad oriental de Andalucía, Castilla-La Mancha y Madrid. De todas formas, hay que tener en cuenta la incertidumbre en la predicción, ya que un pequeño cambio en la posición de la DANA, puede hacer variar la distribución e intensidad de las precipitaciones.

A partir del jueves 31 existe una incertidumbre muy alta en cuanto a la evolución de la situación, que vendría marcada por la posición final de la DANA, con tendencia a ir debilitándose lentamente, e incluso existe la posibilidad que se desplace hacia el norte y sea absorbida por la circulación atlántica, con lo cual la probabilidad de precipitaciones aumenta hacia el norte y disminuye en el sur en los días sucesivos y también va disminuyendo la probabilidad de precipitaciones intensas.