La directora y profesores del CEIP San Gil junto a la concejala de Educación del Ayuntamiento de Cuéllar, colaborador con el movimiento Movember. | Foto: Gabriel Gómez |

| El importe total recaudado por el movimiento es de 15.862 euros que se destinarán al programa Iron Man | 

Semanas después de finalizar Movember, mes del bigote y la concienciación sobre los cánceres de próstata y testicular, los problemas de salud mental y prevención del suicidio masculino; los Butcher Brothers Valladolid hacen balance de los resultados de una campaña atípica y complicada debido a la actual situación sanitaria.

El 8 de diciembre se cerraban en todo el mundo los rankings de recaudación (aunque la posibilidad de hacer donativos sigue abierta todo el año) y la asociación Butcher Brothers, uno de los equipos que apoyan el movimiento en Valladolid, se ha vuelto a situar en el número 1 de la clasificación en España, por segundo año consecutivo, gracias a los 15.862 euros recaudados.

Si el año pasado el Colegio San Gil de Cuéllar ya duplicaba la cantidad de fondos recaudada en 2018 con 1.125 euros este año vuelve a superarse logrando 1.575 euros recaudados para la causa.

El centro escolar cuellarano ha tenido que readaptarse este año suprimiendo su tradicional mercadillo y recibiendo los encargos de mascarillas, chapas, botellas, calcetines, lotería… a través del AMPA y contando también con un punto de venta físico en la villa en la tienda de moda Únika. Los alumnos han decorado bigotes un año más y han abordado el tema en las aulas para poder después trasladarlo a sus hogares.

 

Butcher Brothers

A la campaña promovida por los Butcher Brothers se han sumado gran número de particulares, pero también instituciones como el Ayuntamiento de Valladolid, la Diputación, a través de Alimentos de Valladolid, o los Ayuntamientos de Cuéllar, Aldeamayor, Cigales o Íscar; clubes deportivos, medios de comunicación, centros educativos, pequeñas empresas y profesionales de diversos sectores, artistas… Si a estos datos se suma el resultado de otros equipos vallisoletanos, la cantidad recaudada roza los 18.000 euros; lo que confirma a Valladolid como la ciudad y provincia más solidaria con la causa de la salud masculina por tercer año consecutivo.

Una cerveza especial para la ocasión, La Birrotuda, todavía disponible; mascarillas, chapas y calcetines bigotudos; la Gran Rifa Movember (con más de 140 regalos y más de 60 colaboradores) o un vermú online solidario han sido las fuentes de recaudación más importantes. En cuanto a concienciación una charla-coloquio online sobre cánceres masculinos a cargo del Doctor Sergio Martín Martín del Servicio de Urología de Hospital Clínico Universitario; una charla virtual sobre salud mental y prevención del suicidio, a cargo de la Psicóloga Nieves Andrés Ramírez y un encuentro online con más de 500 niños y niñas (MoKids) y equipos docentes del CEIP San Gil de Cuéllar y del Ana de Austria de Cigaleshan sido, junto con una fuerte presencia en redes sociales, las actividades más destacadas.

“Ahora toca descansar y en unos meses empezar a pensar en la próxima campaña, esperando que para entonces toda esta situación sanitaria haya mejorado, el coronavirus esté bajo control y podamos volver a una cierta normalidad… nos quedamos con la satisfacción de haberlo dato todo, habernos divertido haciendo el bien y dejado claro que con imaginación e ilusión se pueden hacer cosas” afirma José Luis Collazos, miembro del movimiento vallisoletano.

 

Programa Iron Man

En cuanto a los fondos recaudados en España, se destinan al programa Iron Man, coordinado en nuestro país por el doctor Joaquín Mateo, Oncólogo e Investigador en Vall d’Hebron Instituto de Oncología de Barcelona y el doctor David Olmos, jefe del Jefe de Unidad de Investigación Clínica del Cáncer de Próstata del CNIO.

Este programa trabajará con 5000 pacientes de cáncer de próstata en todo el mundo, 500 de ellos españoles (50 por cada uno de los hospitales participantes que se ubican en diferentes puntos del país), con el fin de generar una base de datos a disposición de la investigación y el estudio de aquellos fármacos y tratamientos que mejor se adapten a cada paciente, de modo que se puedan minimizar los efectos secundarios y mejorar la calidad de vida de los pacientes. Este programa se financia en nuestro país con los fondos de Movember Foundation y de la Fundación FERO.