| Por Daniel Martín |
El Cuéllar Santa Teresa pudo ganar los tres puntos, pero también pudo perder el que tenía en los últimos minutos ante el empuje local. Ante El Espinar se vivió un partido trepidante, de alternativas en el marcador, y con errores que costaron goles en ambas áreas. Los de Félix Blanco remontaron un 1-0 adverso, pero se dejaron dos goles de renta en la segunda mitad.
El encuentro en Los Llanos tenía valor doble, en la penúltima jornada antes del parón entre dos equipos situados en la parte alta de la clasificación. Un triunfo cuellarano hubiera puesto más distancia de por medio frente a uno de sus perseguidores que salió en tromba intentando minimizar a un Cuéllar que se sintió embotellado en los primeros minutos. Jandro tuvo que rechazar un disparo raso de Vara al inicio, antes de que Pablo, en un mano a mano, cruzara en exceso el balón.
Dos avisos fueron suficientes para el equipo local que materializaría su tercera llegada con un remate de Vara que superaba a Jandro. El Cuéllar espabiló con el gol en contra, y se quitó de encima esa caraja inicial, comenzando a jugar con cierto criterio el balón. No llegaría en jugada trenzada el empate, y sí a balón parado botado por Pablo Lozano, desde el costado izquierdo, que entraba directa y sin que ni defensores ni atacantes cambiasen su trayectoria. El empate vino precedido en la siguiente jugada del 1-2. Angelín, desde la izquierda metía asistía a Antonio, que en boca de gol culminaba la remontada.
El Espinar igualaría el choque con un lanzamiento ajustado de Vara desde la frontal, superando a un Jandro que solo pudo tocar, sin despejar el balón. Un partido abierto, pero también plagado de despistes defensivos. El 2-3 llegaría tras un balón de Pablo Lozano que filtraba a Demi, que desde la derecha puso un centro, que la defensa no acertó a despejar, y Diego, más listo que los defensas, envió al fondo de las mallas.
El mismo protagonista pudo, a continuación, hacer el 2-4 con otro centro lateral de Demi, pero su cabezazo lo enviaba Joselu a córner con una perfecta estirada. El Cuéllar olía sangre ante un rival nervioso en defensa, que se marcó un tanto en propia portería. Falta frontal que ejecuta Pablo Lozano desde la frontal, y Edu, de cabeza, impulsaba el balón al fondo de la meta local.
La nutrida afición espinariega protestó hasta dos penaltis en área rival, en un partido que se enturbió en los minutos previos al descanso. El equipo cuellarano iba a defender su renta en la segunda mitad, pero poco a poco fue cediendo ante el mayor empuje local, que sin realizar un juego práctico conseguiría hacer el 3-4 con el tercer tanto de Vara.
Los de Félix Blanco trataron de sentenciar el encuentro con balones largos, y al contraataque, pero se encontrarían con un remate, en segunda jugada, de Galapa de volea para igualar el choque a cuatro tantos.
Con varios problemas musculares en jugadores de ambos equipos, el encuentro perdió ritmo, y esas interrupciones provocaron un largo tiempo de añadido en el que ni unos ni otros quisieron arriesgar en exceso, y firmaron la igualada en un partido abierto, y en el que los ataques se impusieron a las defensas. Punto que sirve al Cuéllar para seguir una semana más al frente de la clasificación y mantener la distancia con algunos de sus rivales más directos.
