|  Por Juan Antonio Nieto  ||  Foto: Gabriel Gómez  |

El FS Cuéllar afronta este sábado a las 17 horas el desplazamiento a Pamplona para medirse al siempre difícil San Juan, cuarto clasificado, que está inmerso en la lucha por el título.

Jornada entre parones la que tiene la Segunda B del fútbol sala este fin de semana, ya que la semana pasada la competición paraba por el campeonato de España de selecciones territoriales y la próxima semana se detiene de nuevo por la disputa de la Copa de España.

En lo que se refiere al choque de esta jornada, el FS Mariano Rico se desplaza a una de las canchas más complicadas de la categoría, la del San Juan. Los pamplonicas solo han cedido como locales un empate ante Tafatrans y una derrota ante Ibi. Prácticamente mantienen la plantilla con la que la temporada pasada se proclamaron subcampeones, y con la incorporación de Igor han dado un salto de calidad.

Están situados en la cuarta posición con 38 puntos, a cinco del líder Alzira, por lo que apenas tienen margen de error si quieren seguir aspirando al primer puesto. Es un equipo muy bien trabajado, al que es difícil generar ocasiones y con jugadores experimentados, de calidad y con buen trato de balón. Ya se pudo ver en la ida disputada en Santa Clara, donde se llevaban la victoria por 2-4, siendo una de las mejores escuadras que ha pasado por Cuéllar esta temporada. Llegan a este choque tras ganar los dos últimos partidos, el último de ellos en la cancha del Santurtzi por 2-7.

Por su parte el FS Cuéllar continúa teniendo muchos problemas con las lesiones, lo que está condicionando los entrenamientos, a los que están ayudando mucho los jugadores del Juvenil. A pesar de todo, el equipo viaja a la capital de Navarra con buenas sensaciones y con la intención de traerse algo positivo, aunque la empresa sea complicada por la entidad del rival. Saben que si son capaces de hacer su partido tienen opciones de dar la sorpresa, aunque para ello tengan que hacer el encuentro perfecto, es decir, no cometer errores que den facilidades a su rival y sobre todo aprovechar las ocasiones que generen, puesto que ante este tipo de rivales cada error en defensa y ataque se paga caro.

Las bajas condicionan la convocatoria de Óliver Fraile que tendrá que hacer encaje de bolillos para la convocatoria ya que esperará hasta el último instante para ver la evolución de varios jugadores que arrastran molestias. Lo que está claro es que de nuevo irán convocados varios componentes del Juvenil.