El Diputado, Juan Luis Gordo, durante una intervención en el Congreso.

El Diputado, Juan Luis Gordo, durante una intervención en el Congreso.

El diputado socialista, Juan Luis Gordo, presenta una Proposición no de Ley en la que insta al Gobierno a que “acepte y regule la multi-actividad de trabajadores resineros ya cotizando por otra actividad, encuadrados en otro régimen”.

También demanda que se regule “la multitarea de resineros que ya coticen como trabajadores autónomos agrarios”.  Gordo explica que “la resinación es una actividad muy adecuada para combinarse con otras tareas económicas en el medio rural, porque se acomoda perfectamente a un actividad a tiempo parcial”.

Asímismo afirma que “la extracción de resina natural puede ser una salida eficaz a la crisis económica para muchos trabajadores, como forma de creación de empleo directo e indirecto en áreas rurales desfavorecidas”.  También añadió que “es necesario analizar los perjuicios sociales y ambientales que el abandono de parte de los resineros actualmente activos y la no incorporación de otros interesados, por la incorrecta interpretación de la fiscalidad aplicable”. “Esos mismos efectos negativos se dejarán sentir en el aspecto económico, e incluso en los ingresos de las arcas públicas, que perderán los correspondientes a las afiliaciones y al IVA que corresponde al régimen aplicable”, continuó diciendo. Además para Gordo, “este abandono supondrá para las empresas del sector químico nacionales la necesidad de importar esta materia prima natural y renovable, que no se produciría en España”.

Por el contrario, el diputado socialista afirma que “la extracción de resina natural puede ser una salida eficaz a la crisis económica para muchos trabajadores, como forma de creación de empleo directo e indirecto en áreas rurales desfavorecidas”. En opinión del diputado socialista, “esta actividad permitiría crear miles de empleos en áreas rurales desfavorecidas del país, garantizar el abastecimiento a la industria española, que junto a la portuguesa es una de las más importantes de la Unión Europea, y con la gran ventaja añadida de contribuir a la prevención de incendios forestales”. Por último, recordó que “en España existen 1,4 millones de hectáreas de pino negral o resinero, de las cuales cerca de un millón estuvieron en producción durante la década de los sesenta, en que España alcanzó su máxima producción histórica, con más de 60.000 toneladas. Alrededor de 5.000 resineros mantenían en producción 25 millones de pinos y eran la base de una intensa actividad en las comarcas productoras, que configuró los paisajes del interior y contribuyó a un temprano desarrollo rural”.