La predicción meteorológica se cumplió y la lluvia comenzó a caer coincidiendo con la hora de salida de la procesión del Niño de la Bola. Las primeras gotas comenzaban a caer cuando los dulzaineros, los Hermanos Ramos, entonaban la primera de las piezas con la imagen a punto de abandonar el templo portada en andas. La lluvia se hacía más intensa y los danzantes se retiraban. La imagen se cubría con un plástico para evitar su deterioro pero la intensa lluvia obligaba a suspender la procesión por las calles del casco histórico y a tomar la alternativa de desarrollarla en el interior de la iglesia. Así el pasillo central fue el recorrido de la imagen portada en andas, al son de la dulzaina y el tamboril y con los danzantes bailando de cara a la imagen como es tradicional.

No faltaron los villancicos al Niño, el suyo propio y otros tradicionales que se entonaron en el templo.

Cofrades, danzantes y público lamentaron que la procesión no hubiera podido desarrollarse como es tradicional, si bien esta es la primera vez que se desarrolla en el interior de un templo, ya que en otras ocasiones, cuando el tiempo no ha permitido sacar la imagen, el desfile se ha suspendido por completo.

La mayordoma, Alicia Sanz, manifestó su pesar porque la procesión no hubiera podido celebrarse y mostró su confianza en que el miércoles 6 de enero los actos puedan llevarse a cabo con normalidad.

Niño de la Bola

La Camarera de la Cofradía, Rosario Manzanares, es cada año la encargada de vestir la imagen, que vestía un traje en color beis y remates dorados. Un traje del siglo XIX, que según señaló el historiador Juan Carlos Llorente, puede ser una imitación de otro del siglo XVIII. Su deterioro hacía que los devotos confeccionasen otros nuevos. Apuntó que entre las beatas que elaboraron réplicas de esos trajes se encontraba Sor Martina de la Cruz, quien pudo ser la autora del que llevaba ayer el Niño.

La existencia de la Cofradía del niño de la Bola está datada en el siglo XVII. El primer libro de actas que se conserva es de 1679, pero no es el fundacional, por lo que se piensa que la fundación pudo ser anterior a esa fecha. El recorrido de las dos procesiones y su horario han variado con el paso de los años, la entrada y salida se realiza ahora desde la iglesia de San Miguel donde se trasladaron por el deterioro de la sede de la imagen, la iglesia de San Esteban, ya restaurada. Allí la procesión realiza ahora una parada para entonar el villancico al niño y otros tradicionales, para desde allí tornar a San Miguel. Se perdieron también los trajes que tradicionalmente vestían los danzantes por un incendio en casa del mayordomo. Éstos eran similares a los de la Cofradía de Las Candelas que también desaparecieron.

Apunta Llorente que también dejaron de celebrarse los bailes en la Plaza del Estudio o en la del Mercado del Pan tras las procesiones, aunque se mantienen los refrescos tras la misa y la procesión con algunas variaciones.

Señala Llorente que debía ser muy emocionante la costumbre de la danza a la salida y llegada de la procesión, los danzantes esperaban arrodillados para tras la música de la Marcha Real iniciar la danza de la entradilla. Después los danzantes seguían tras las andas del niño hasta el altar mayor, danzando y haciendo genuflexiones.

Día de Reyes

Como es tradicional el miércoles 6 de enero, la imagen el Niño de la Bola, protagonizará la segunda procesión del año, aunque este año será la primera por las calles de la villa. A las 12.30 horas tendrá lugar la misa en la iglesia de San Miguel tras la cual la Cofradía ofrece un refresco a los asistentes.

La imagen partirá de la iglesia de San Miguel, en la Plaza Mayor para la procesión a las 17.00 horas y discurrirá por la calle Colegio, Mercado del Pan y calle Palacio hasta la iglesia de San esteban, su sede original, en cuyo interior se realizará una parada para entornar los tradicionales villancicos al Niño. Desde allí la procesión emprenderá el camino de vuelta a la iglesia de San Miguel por las calles Palacio y Duque de Alburquerque hasta la Plaza Mayor para concluir en el templo. Tras la procesión el Centro Parroquial acoge un nuevo refresco para los asistentes.

Como en años anteriores desde la Cofradía se han realizado calendarios que pueden adquirirse durante las misas y procesiones con un donativo de dos euros para sufragar los gastos que suponen las procesiones. La imagen del Niño de la Bola rodeada por una imagen del altar mayor de la Iglesia de San Esteban es la que ilustra este calendario.


Villancico al Niño de la Bola


Adiós Niño cariñoso
adiós Niño muy querido
adiós capullo nacido
del más cándido rosal.

 

Al irme de tu presencia
te consagro mi cariño
bendíceme dulce niño
que desde hoy te quiero amar,
bendíceme dulce niño
que desde hoy te quiero amar.

 

Adiós dulce Niño, adiós tierno infante
adiós dulce amante, adiós, adiós, adiós.
Es tal tu hermosura,
es tal tu candor
que el alma me roba,
que el alma me roba,
que el alma me roba
me roba el amor.