| En total aparecen una quincena de parajes de la Comunidad de Villa y Tierra de Cuéllar |

| Pociaguillo en Lovingos, las pegueras de Chañe y las fábricas de resinas de otras localidades como Navas de Oro también están recogidas |

|Fotos: Enrique del Barrio |

Tras el éxito de ventas conseguido con el libro `Segovia Callada´, un año después el fotógrafo y editor Enrique del Barrio, y la periodista e investigadora Esther Maganto, dan a conocer al gran público su segunda obra dedicada al patrimonio arquitectónico segoviano en ruinas. `Segovia Callada´ Volumen II recoge un nuevo centenar de parajes `sorprendentes´, que descubren al caminante o cicloturista la Segovia más inadvertida a través de los restos de edificaciones religiosas, civiles, defensivas e industriales, a los que ahora se suman ejemplos de arquitectura tradicional o vernácula.

En la Comunidad de la Villa y Tierra de Cuéllar la obra recoge quince ejemplos singulares, entre otros cinco localizados en Cuéllar, como la iglesia de Santiago, el molino de viento de El Cubo, el Puente de Barrancales o la Torre de Santa Marina; también, las pegueras de Chañe, el Molino de Botiller en Escarabajosa de Cuéllar, las Tejeras de los Serafines en Lastras de Cuéllar, Pociaguillo en Lovingos, la fábrica de colofonia de Chatún, el Palacio de Buengrado de Perosillo o las fábricas de resinas que existieron en Navalmanzano, Navas de Oro, Pinarejos y Sanchonuño.

Como libro de viajes ceñido al territorio provincial y ordenado de acuerdo a las Comunidades de Villa y Tierra, se revela como un título autoeditado, singular y distintivo, que se aleja de los tránsitos turísticos más comunes, con el fin de enarbolar el turismo familiar o en grupo en cualquier época del año. Las cerca de quinientas fotografías, el sobrepasado centenar de textos y el código QR que contiene cada ficha, permitirán al viajero la perfecta localización de los enclaves.

El libro se puede adquirir en Cuéllar en las librerías País de Jauja y El Grillo.