Vecinos de toda la villa se sumaron el pasado fin de semana a los del barrio de San Andrés en la celebración de sus tradicionales fiestas. Las actividades comenzaron el viernes por la noche con el concierto en tributo al grupo Led Zeppelin que se celebró en el bar La Traviata. El noveno concurso de tapas fue la actividad estrella de la programación y contó con once participantes que se esmeraron en la preparación de sus tapas para los centenares de personas que las degustaron durante el fin de semana.

Los más pequeños pudieron disfrutar el sábado y el domingo de encierros infantiles, cómicos e hinchables. Y el sábado una discomóvil puso la nota musical, aunque el frío y la lluvia hicieron que la afluencia de público fuese menor de la esperada. El domingo se celebró, como es habitual en los últimos años, un torneo de “mini mus” en el café Las Iglesuelas en el que participaron doce parejas y que ganó la formada por Héctor Polo y Tomás Ángel Jiménez.

También hubo espacio para la solidaridad con el rastrillo organizado por la asociación Lampica y Amigos Solidarios de Cuéllar, que ofreció en las casetas instaladas en la plaza de San Andrés los objetos recogidos días antes, con el fin de ayudar a las familias de Cuéllar que atraviesan momentos difíciles y especialmente a aquellas que tienen niños a su cargo. La música y la magia contribuyeron también a amenizar las jornadas festivas, que concluyeron el domingo con una gran parrillada al son de la dulzaina y el tamboril.