Unión de Campesinos de Segovia-UCCL  ha solicitado al Director General de Política Agraria Común, Pedro Medina, “que proceda a realizar de oficio las correcciones oportunas para adaptarse a la nueva definición de pastos que contempla el Reglamento Omnibus, para que, desde esta campaña, tenga efecto práctico entre los ganaderos de Castilla y León y aumente la superficie considerada como admisibles en los pastos de nuestra comunidad”.

Señalan que el daño a los profesionales agrarios ya fue realizado el primer año de aplicación de la PAC en 2015, cuando los ganaderos recibieron la asignación de los derechos de pago básico en función de los criterios de los Coeficientes de Admisibilidad de Pastos, CAP, lo que supuso una reducción considerable tanto de la superficie, como del número de derechos.

Por otro lado, manifiestan que las dehesas, bosques mediterráneos formados por encinas, alcornoques u otras especies, con un extracto inferior de pastizales, “han visto reducida considerablemente su superficie y ha implicado un bajo valor de los derechos de pago básico en estas superficies, cuando se trata de unos espacios de un alto valor medioambiental”.

Estas superficies de 2015 vieron reducida su extensión porque consideraban que las copas de los árboles, una parte fundamental del bosque mediterráneo, no eran pastables y por tanto el número de derechos de pastos asignados fue menor.

UCCL Segovia solicita “la revisión de todas las superficies de pastos de oficio, de forma que se corrijan las desigualdades generadas en el pasado y compense en parte el bajo valor de los derechos de pago básico asignados a los ganaderos de las dehesas, cuyo valor medioambiental es incalculable”.