|Fotos: Rosa Quintana|
Broche de oro a la primera parte del curso del programa impulsado por la Diputación “Aulas para Convivir Cantando” con la actuación de las 16 formaciones que intervinieron en el certamen en la iglesia de Nuestra Señora de la Asunción de Fuenterrebollo. La localidad tomó así el relevo a Martín Muñoz de las Posadas y Santa María la Real de Nieva, que acogieron el festival los dos años anteriores.
El público pudo ir disfrutando y valorando el trabajo de los coros de los doce pueblos que participan en el proyecto: Navafría, Torre Val de San Pedro, Pedraza, Veganzones, Sebúlcor, Martín Muñoz de la Dehesa, Juarros de Voltoya, Martín Muñoz de las Posadas, Cozuelos de Fuentidueña, Adrados, Frumales y Sauquillo de Cabezas
También actuaron el coro de voces graves y el coro selección, con las mejores voces de los doce pueblos, así como el coro de Fuenterrebollo, que aunque no participa en el programa, puso la nota local al certamen.
Como clausura del Festival el gran Coro de Aulas para Convivir Cantando, integrado por más de 200 voces, interpretó el tradicional villancico “Noche de Paz”.
El diputado de Cultura y Turismo, José Carlos Monsalve, cerró el acto dirigiendo unas palabras a todos los asistentes a esta cita musical.
Este Festival es el primer acto de una larga serie de actuaciones que durante las Navidades protagonizan los distintos coros de Aulas para Convivir Cantando en diferentes localidades de la provincia.
Finalizadas las vacaciones navideñas, los distintos coros volverán al trabajo diario bajo la dirección de José Ramón Bayón. El curso se clausurará, con un nuevo festival ya en la capital, en el Teatro Juan Bravo de Segovia.
Convivencia
El origen de estos coros está en el desarrollo del proyecto denominado “Aulas para convivir cantando” que surgió, por iniciativa de la Diputación de Segovia, en el curso 2011-2012. Es esta una actividad de convivencia, de integración y de alternativa cultural y creativa para pequeñas localidades en las que este tipo de propuestas resultan difíciles de abordar por sus vecinos o sus ayuntamientos en solitario.
Coordinado por el departamento de Cultura de la Diputación, un profesor recorre semanalmente los doce pueblos y comparte con sus vecinos un tiempo en el que, además de estar juntos nietos, padres y abuelos, educan sus voces, adquieren algunos conocimientos musicales y, sobre todo, cantan juntos. De esas horas compartidas y de otras robadas a los fines de semana para desplazarse a los pueblos vecinos y cantar conjuntamente con los alumnos de otras localidades es de donde ha surgido el repertorio que interpretaron el sábado en Fuenterrebollo.