Una de las reses que ha llegado a las calles de Cuéllar.

Una de las reses que ha llegado a las calles de Cuéllar. |Foto: Gabriel Gómez|

El primer teniente alcalde, Javier Hernanz, y el edil de Policía, Marcos Rodríguez, han valorado el encierro de hoy, un encierro en que han señalado “desde el principio las cosas no han ido todo lo bien que desearíamos que fueran”. Así Hernanz señaló que desde la suelta una de las reses se ha ido hacia la derecha y gracias a la intervención de un caballista se ha evitado un riesgo mayor. Ha apuntado que enseguida se ha disgregado la manada en cinco grupos distintos con un toro por delante, dos por detrás que han sido los primeros en cruzar las máquinas y tres se han quedado en los pinares por separado.

Tras el paso de la carretera y el túnel por parte de los tres primeros todos, Hernanz señaló que por orden del director de campo, Pedro Caminero, se ha detenido la manada para volver a los cabestros en busca de un cuarto toro que se ha logrado reconducir. Tarea que se ha consumado con éxito, aunque ha supuesto un retraso en la llegada del encierro a la villa. Ya  en lo alto de El Embudo ha apuntado que las reses han continuado dando problemas y finalmente se han encauzado tres toros junto a los bueyes que han sido los primeros en llegar a las calles. El que ha quedado en la parte alta de El Embudo se ha quedado finalmente en la arboleda donde finalmente se le ha inmovilizado “hemos pensado que lo más coherente  y de sentido común era no poner en peligro a la gente y que no entrara en el recorrido”, ha afirmado.

Las otras dos reses han sido también inmovilizadas, priorizando la seguridad de los ciudadanos, de ese modo primero se ha actuado con el que se encontraba en la zona de Las Máquinas, después el de la zona de El Embudo y finalmente el tercero, localizado gracias a un caballista de Peñafiel en la delimitación del pinar de la Comunidad de Villa y Tierra en el término de Frumales, a unos 8 kilómetros del municipio.

Rodríguez ha subrayado el riesgo que entrañaba la presencia de un toro en El Embudo, motivo por el que hasta que no ha sido inmovilizado no se ha dado por concluído el encierro y motivo por el que se ha decidido suspender la celebración de la probadilla matinal.

Hernanz ha señalado que en los corrales de la plaza estaban ya cinco toros para ser lidiados esta tarde y estaban a la espera de ver  la evolución del sexto.

Caballistas

En cuanto a la presencia de caballistas a lo largo del recorrido campestre a parte de los 20 autorizados, Hernanz señaló que  dados los problemas que se han producido desde el inicio del festejo no ha sido una cuestión que haya centrado su atención. Rodríguez ha desmentido que en la suelta hubiera más de los 20 caballistas autorizados para acompañar a los directores de campo, un hecho que ha asegurado ha comprobado él mismo junto al director de campo. Si señaló que algunos de ellos no portaban la camiseta distintiva y se les ha instado a cumplir con ese detalle.

Los ediles no han entrado a valorar si la falta de periodo de encabestramiento de las reses de Castilblanco en las fincas de los directores de campo ha podido ser la causa de lo sucedido en el encierro. Hernanz ha afirmado “el toro es un animal bravo y no viene con las prescripciones”, asegurando que esto ya ha ocurrido en otras ocasiones.

“Esto aquí puede suceder” ha dicho, y ha destacado la labor de todos los caballistas que han participado en el encierro y que han hecho que al menos tres reses llegaran al coso taurino.