Rubén Luengo, del CD Cuéllar, pugna por un balón con un jugador del Mozoncillo. | Foto: Gabriel Gómez |
| Hasta en dos ocasiones el larguero evitó el tanto de los locales |
| Segunda jornada consecutiva sin encajar goles |
| Por Daniel Martín |
El Cuéllar sumó un nuevo empate tras un partido disputado en el que dominó al Mozoncillo en la segunda mitad. Rubén y Rodri de sendos remates se toparon con el larguero, evitando lograr el tanto para su equipo. El conjunto visitante fue de más a menos, y solo puso a prueba a Clodo en la primera mitad.
Tercer partido de los últimos cuatro puntuando, o segundo partido sin encajar goles. Los números respaldan el momento actual de un CD Cuéllar que mereció mejor suerte ante el Mozoncillo que se escapó con un punto de Santa Clara.
Con un Víctor Roldán muy activo en el centro del campo, los visitantes tuvieron dos ocasiones que desbarataba Clodo con buenas acciones. Primero a disparo de Rober y luego tras otra intentona de Tiquis.
El Cuéllar comenzaba a presionar a su rival, y a crearle peligro, primero a balón parado. Rubén Luengo botaba una falta, y el viento provocó un efecto inesperado y el balón acababa golpeando el larguero.
Justo a continuación, tras un contraataque el Cuéllar pedía penalti por manos de un rival, y luego no conseguía rematar a gol. De esa jugada nacía un córner que botaba Gonza y casi repetía el gol olímpico de la jornada anterior.
Al descanso el partido llegaba igualado, sin más claras ocasiones para ambos conjuntos. El Mozoncillo se fue diluyendo cual azucarillo en la segunda mitad, y el Cuéllar con un Rodri muy móvil, empezó a generar peligro. Primero tras un barullo en el área, que se encontraba el guardameta Óscar, y luego con un tiro flojo del propio Rodri.
El viento volvía a ser protagonista en un disparo lejano de Churro que a punto estuvo de colarse en la portería visitante. El esfuerzo de ambos equipos se notaba sobre el césped de Santa Clara, y los dos equipos tenían que mover el banquillo para refrescar el once en liza.
Rodri iba a disponer de dos buenas acciones, primero con un slalom, marchándose de varios defensores, pero en el último toque perdía el control del esférico. Y después tras peinar una falta de cabeza, el balón se estrellaba en el larguero.
Gracias a esa lucha y perseverancia en un forcejeo con un rival el colegiado le mostraba la segunda amarilla y dejaba al Cuéllar con diez jugadores. Apenas quedaban dos minutos y el descuento, en el que el Cuéllar pudo lanzar un par de contraataques gracias a Rubén Luengo, pero que no llegaron a buen puerto.
La próxima semana el conjunto de Félix Blanco visitará Prádena para buscar prolongar la racha que le ha servido para sumar cuatro de los últimos seis puntos en juego.
