El fotógrafo cuellarano Enrique Madroño suma a su palmarés dos nuevas nominaciones en la décimo octava edición de los Premios Goya de Fotografía y Video Profesional en las categorías de Retrato y Gráfico-Documental.
Madroño recibe estas nominaciones como “una inmensa alegría” que le llega tras haber pasado un bache en lo personales. Para él es una satisfacción haber logrado dos nominaciones en dos categorías diferentes y recuerda como hace 18 años ya consiguió estar nominado en el apartado de boda.
El retrato es una imagen de un hombre tomada en el estudio y la fotografía seleccionada en gráfico-documental está tomada en un hospital y el autor explica que muestra al paciente en la cama a través de las persianas de la habitación que simulan los barrotes de una cárcel que en este caso sería la enfermedad contra la que lucha.
Estos premios Goya, que nacieron antes que los de cine, concretamente en 1983, fueron concebidos como un escaparate nacional para sacar del anonimato a un buen número de profesionales mostrando sus trabajos en boda, retrato, gráfico-documental y libre creación.
La gala de entrega de los premios será el próximo 2 de febrero en el centro de Historias de Zaragoza. La exposición con las fotografías nominadas se inaugurará el miércoles 23 de enero y podrá visitarse hasta el 29 de enero en la sala de exposiciones Aragonia.
El autor
Madroño cuenta con un amplio palmarés de nominaciones y premios. A estas conseguidas este año suma el esquinero de oro y dos méritos que logró en la categoría de retrato dentro de la Colección de Honor de la Federación Española de Profesionales de la Fotografía y la Imagen, FEPFI, en 2018. A ellos suma un Premio de Calidad de la FEPFI por haber logrado tres Colecciones de Honor consecutivas, un Premio de la Comunidad Foral de Navarra en la categoría de boda, una nominación a los Goya también en boda, una nominación a los premios de la Comunidad Valenciana en libre creación y otro en la misma categoría en los Premios de Andalucía.