Parte de la plantilla de Segunda B del FS Cuéllar Cojalba de la temporada 2019/20. | Foto: Gabriel Gómez |

| Por FS Cuéllar |

Este sábado, en el horario habitual de las 18:30 horas, el FS Mariano Rico Cuéllar tiene un complicado compromiso en la visita del San Juan de Pamplona, tercer clasificado, a Santa Clara.

Quedan ocho jornadas para el final de la liga y todo por decidir tanto por arriba como en la zona baja. Por ello cada partido es una final.

Los pamploneses están volviendo a cuajar otra gran temporada, metidos desde el principio en la zona alta. A pesar de perder algún componente de pasadas campañas, las incorporaciones que han hecho se han adaptado muy pronto al equipo y de ahí su gran rendimiento.

Es una escuadra de mucha calidad y bien trabajada que sale desde el principio a por los partidos con una fuerte presión en campo rival. Esto le convierte en una de las mejores defensas del grupo, siendo este uno de sus puntos fuertes. Tienen muchas variables en ataque con buena estrategia además de varias individualidades que pueden romper los partidos.

Llegan a este encuentro tras empatar en su campo ante Ibarra. En la ida se imponían a los de Natalia Maroto por un ajustado 5-4.

Tras venirse de vacío de tierras vizcaínas la anterior jornada después de hacer un gran partido, el FS Mariano Rico  Cuéllar disputará otro difícil choque ante otro de los grandes de la categoría.

Los cuellaranos quieren llegar al parón de la próxima semana fuera de los puestos de descenso. Por ello afronta este compromiso como una nueva final en la que espera que Santa Clara siga siendo un fortín para que los tres puntos suban a su casillero.

Enfrente tendrán a uno de los gallitos, ante el que deberán hacer un partido casi perfecto. Seguramente sea un choque de máxima intensidad en el que no hay que tener errores tontos de los que luego arrepentirse, y estar concentrados durante los cuarenta minutos. El acierto de cara a puerta también será un factor clave ya que ante estos equipos no se puede perdonar, porque luego se paga.

Poco a poco la enfermería cuellarana parece que se va vaciando aunque para este partido Natalia Maroto tiene las bajas seguras de Gonza, Samu y Davicillo. La entrenadora cuellarana espera tener al resto de la plantilla en una mínimas condiciones para este importante partido y no tener que tirar del equipo juvenil por primera vez en mucho tiempo.