| Ubicada en la fachada sur tiene dos pilastras y una columna lisa con capitel decorada con elementos vegetales, y arcos decorados con punta de diamante |

| Las obras está previsto que concluyan en el mes de octubre | 

| Fotos: Gabriel Gómez |

Mudéjar, gótico, románico, renacentista… las obras de restauración que se están ejecutando en la iglesia de La Cuesta de Cuéllar están sacando a la luz restos de elementos arquitectónicos de diferentes épocas, muchos más de los que  los estudios preliminares  que se realizaron en el templo avanzaban. Algunos de gran valor, como la portada románica hallada en el muro sur que podría adelantar la fecha de construcción del templo.

El jefe de obra, el arquitecto Fernando Nieto, señala que hasta ahora se ha ejecutado la demolición de estructuras añadidas en el interior de la galería o atrio norte, la liberación de tapiados de esa arquería, el picado de los enfoscados, se ha levantado la cubierta y se ha realizado la impermeabilización y nueva cobertura con teja en todo el templo, a excepción de la torre que fue restaurada en 2001.

En el cuerpo sur del templo se ha reparado la estructura de la cubierta, lo que incluye la sacristía y los restos del claustro, que hoy se utiliza como almacén.

Tras sacar a la luz la arquería mudéjar se ha procedido a la restauración minuciosa de los cuatro arcos de la fachada norte y uno de la fachada oeste. Nieto detalla que es una arquería de triple rosca con pilastrillas y alfiz. También se ha procedido a la reposición de revocos de cal y se ha comenzado con los enlucidos de yeso.

Por otro lado, se ha llevado a cabo la demolición de la escalera del coro para su sustitución y se han realizado los revocos de las fachadas norte y sur, y la reposición de rejuntados y revocos en  la fachada oeste tras la limpieza de suciedad y líquenes adheridos. Nieto añade que también se ha procedido a la limpieza y restauración de revocos en el exterior del ábside.

Hallazgos

En la galería o atrio norte la restauración y limpieza de la arquería ha permitido recuperar la imagen exterior del templo y el espacio interior del edificio, “que es lo más vistoso de la obra”, destaca el arquitecto. Así apunta que han encontrado que solo había antepeto en un arco. El arco situado a la izquierda de la puerta estaba cegado por un muro gótico con un gran óculo de sillería que puede apreciarse desde el exterior en forma de ventana circular. En cuanto al arco exterior, cegado por la portada gótica, segundo arco por la izquierda, antes de la intervención ya se veía que estaba cegado y desde el interior se está restaurando la arquería de ladrillo que se aprecia desde el interior.

Esas dos arcadas, que están cerradas, “se corresponden con una capilla gótica de cerramiento, con una bóveda apuntada al interior y dos arcos sólidos”.

Pinturas murales aparecidas. | Foto: Gabriel Gómez|

Nieto señaló que el mural con pinturas de gran valor que cuya aparición anunció en abril la Junta, no es en verdad que se haya encontrado un mural, sino que “se han encontrado pinturas murales, con decoración de despieces arquitectónicos imitando ladrillo, imitando sillar, sobre una  capa de yeso”. Explica que se han encontrado varios trozos de esta decoración “que indicaban que esa capilla en la época gótica estuvo cerrada y decorada de este modo. Tapando incluso los ladrillos, la piedra etcétera estaban estas pinturas murales”. Unas pinturas que según indica son muy parecidas a otras que hay en otras iglesias de Cuéllar en las que en los ábsides sobre una capa de yeso se pinta ladrillo.

Hallazgos importantes han sido los de las portadas románicas. En la existente en el muro norte, una vez liberada de recubrimientos, ha aparecido una estructura románica en la parte inferior hasta los arcos. Destaca Nieto que en se ha encontrado una portada románica del templo original con pilastras y columnas de fuste liso y con capiteles mutilados debido a una intervención posterior. Unos capiteles que se están restaurando, aunque sin detalles. En la parte superior aparecen unas arquivoltas de factor renacentista, del siglo XVI, que ahora se mostrarán sobre la piedra una vez retirada la capa de pintura y yeso que las cubría.

Restos de la portada románica del muro sur. | Foto: Gabriel Gómez|

En la portada sur han aparecido restos de una antigua portada románica que estaba tapada por mampostería de piedra. Han salido a la luz dos pilastras y una columna lisa con capitel “muy interesante” según Nieto, y decorada con elementos vegetales esquemáticos hasta un tercio del desarrollo original de las arquivoltas. Éstas tienen tres arcos concéntricos, y la del centro tiene una decoración en punta de diamante “que es una decoración bastante arcaica” y, que a la espera de estudios de especialistas, podrían aportar una información sobre la construcción original de la iglesia con respecto a lo que se estimaba en los estudios previos actuales sobre el templo. Esos estudios apuntaban a que la primitiva iglesia podía ser del siglo XIII, sin embargo estos hallazgos podrían situarla entre lo más antiguo del patrimonio de Cuéllar.

En la zona de la escalera del coro, tras su demolición, por debajo del suelo actual ha aparecido otro más primitivo, y por debajo de éste una serie de tumbas antropomorfas, excavadas en el terreno, que corresponderían a la iglesia primitiva.

Nieto destaca el “trabajo minucioso” que se está llevando a cabo por parte de la empresa TRYCSA, en cuanto a la recuperación ya que había muchas piezas deterioradas debido a los múltiples usos que ha tenido la zona.

 

Trabajos pendientes

Entre los trabajos pendientes de ejecutar se encuentra la localización de restos de la arquería sur, ya que existen indicios de la existencia de una arcada de triple rosca de ladrillo junto a la sacristía “y eso queremos liberarlo porque sería muy interesante que llegáramos a encontrar restos de esta arquería”. Esta arquería sería muy parecida a la que se muestra ahora en la fachada norte.

Tienen también que llevar a cabo la sustitución de la estructura y la cubrición de la antesacristía, espacio que va desde la nave hasta la sacristía.

En el atrio norte, ya restaurado, falta  el techado interior con estructura de madera, muy similar a lo que era la capilla originalmente, y falta el solado y la colocación de rejas.

En la zona de la capilla norte, de estilo gótico y bóvedas barrocas, queda finalizar la restauración interior de las arquerías de ladrillo y de las molduras barrocas. Resta también la reparación del enlosado y la restauración de la portada románica del muro norte.

Ya en el interior de la nave deben restaurarse las molduras barrocas y renovarse todas las pinturas de acuerdo con los estudios de  policromías que indican la pintura original que tenía el templo. Una muestra de pintura original que se extrajo de la parte posterior del órgano del coro.

Pendiente está también la nueva escalera de acceso al coro y el entarimado de ese espacio, además de la sustitución de la carpintería interior y exterior de la iglesia  que incluye las tres puertas principales de acceso a la nave y casi la totalidad e las ventanas de ésta y de la sacristía, y la instalación eléctrica e iluminación.

Nieto estima que los trabajos podrían estar concluidos en el mes de octubre.

La obra es promovida por la consejería de Cultura y Turismo de la Junta de Castilla y León y cofinanciada por el Fondo Europeo de Desarrollo Regional, los fondos FEDER.  Esta fue adjudicada a la empresa TRYCSA por 450.525,94 euros y se ejecuta siguiendo el proyecto redactado por Fernando y Jesús Nieto que asumen también la dirección de obra.

El Ayuntamiento de Cuéllar ha colaborado con los trabajos costeando la retirada del cableado eléctrico de los muros exteriores de la iglesia.