Presentación del Proyecto.
La estrecha cooperación entre las entidades públicas y privadas constituye una nueva forma de mecenazgo para la recuperación, conservación y difusión del patrimonio histórico. La Junta de Castilla y León mantiene la colaboración con el Ayuntamiento de Sacramenia, iniciada con la consolidación de la ermita, y apoya la propuesta cultural que va dirigida a la gestión completa del monumento.
La intervención realizada por la Junta en la ermita se centró en la reparación de la cubierta y los muros del temploEl delegado territorial de la Junta en Segovia, Javier López-Escobar, y el alcalde de Sacramenia, Juan Carlos Muñoz-Reja, acompañados por la presidenta de la asociación cultural ‘Nuestra Olma’, Maribel Lázaro, han presentado esta mañana en la Delegación el proyecto cultural puesto en marcha en torno a la ermita románica de San Miguel, una ambiciosa propuesta que se deriva de la consolidación del monumento llevada a cabo por la Junta de Castilla y León.
Durante la presentación, López-Escobar ha recordado que la obra realizada en la ermita “es una de las actuaciones incluidas en el Plan PAIHS de Castilla y León y responde a la consideración del patrimonio como un bien común de todos los ciudadanos”, por ello la iniciativa del municipio de Sacramenia en torno a su ermita, en la que colaboran estrechamente la Junta, el Ayuntamiento de Sacramenia y la asociación `Nuestra Olma´, constituye un claro ejemplo de gestión integral y participativa de un monumento, que potencia recursos y resultados.
La intervención realizada por la Junta en la ermita se centró en la reparación de la cubierta y los muros del templo. Para ello se reforzaron la cubierta de las bóvedas del presbiterio y el ábside y también se repararon y protegieron las cabezas de los muros sobre la portada de la iglesia. Las administraciones local y regional y la asociación cultural de Sacramenia están comprometidas en una restauración más integral de la ermita y continúan trabajando en este sentido.
Como consecuencia de la consolidación del monumento, el Ayuntamiento de Sacramenia promueve un importante programa cultural que gira en torno a la ermita de San Miguel. Un extenso abanico de actividades destinadas a la población local y a los visitantes, que pretende además favorecer el conocimiento y la participación de los vecinos en el desarrollo del proyecto.
El responsable del equipo redactor de la propuesta, Ángel Palomino, ha explicado que para alcanzar estos objetivos a corto, medio y largo plazo, el proyecto se estructura en cuatro ejes fundamentales: interpretación y divulgación de la ermita; difusión, comunicación y promoción del bien; gestión y uso del edificio; y recuperación patrimonial. Estos cuatro bloques comprenden 22 acciones que abarcan desde la señalización de la ermita y su entorno, o el diseño de itinerarios didácticos y pedagógicos, a la organización de presentaciones, encuentros, seminarios y actos sociales.
En definitiva, la estrategia diseñada permite disponer de un plan de actuación amplio y diversificado, de acuerdo con una planificación temporal pautada en la que cada acción tiene su momento, con un objetivo global claro: la integración del recurso patrimonial que representa la ermita de San Miguel en la dinámica social, cultural y económica de Sacramenia.
Bien de Interés Cultural
La iglesia, de estilo románico rural popular y situada en el cerro que protege por el norte la localidad de Sacramenia, fue construida en el siglo XII y declarada bien de interés cultural, con categoría de monumento, en febrero de 1983. En la actualidad, subsiste escasa parte de los muros de su única nave, que estuvo abovedada. También se conserva una interesante portada orientada hacia el sur, que sobresale ligeramente del muro, y se articula con cinco arquivoltas de medio punto que descansan en impostas y columnas con capiteles de factura ruda y tosca.
La capilla mayor es como la de la su homóloga de Fuentesoto, pues también posee un arco triunfal doblado sobre columnas geminadas con capiteles historiados y se compone de un tramo recto cubierto con bóveda de medio cañón y ábside semicircular, con bóveda de horno. Al exterior se divide verticalmente por dos columnas adosadas en tres paños con ventanas de medio punto sobre columnillas y conserva buena parte del alero con sus canecillos decorados. En el interior, repite esquema parecido y se decora con arquerías de medio punto sobre columnas tanto en el ábside como en el presbiterio.
Los trabajos de consolidación, que han rescatado de la ruina los restos de este pequeño templo románico, se ejecutaron tras los llevados a cabo a principios del año 2008, en los que la Consejería de Cultura y Turismo realizó un estudio histórico de la ermita, que incluyó una excavación arqueológica, la lectura de los paramentos y el estudio de las pinturas murales de la iglesia.
