El último relevista a su llegada a El Henar el pasado año. | Foto: Gabriel Gómez |


| Unos cincuenta corredores participarán este año en la carrera |

El santuario de El Henar volverá a ser mañana el punto final de la `Carrera a El Henar´, una prueba de relevos que partirá de Valladolid con flores para entregar a la virgen. Una cita con la que cumplen anualmente sus organizadores, que mezcla el deporte y la devoción mariana, y que se ha venido celebrando cada año desde 1959, celebrando este año su 64 edición.

Superadas ya las limitaciones que la pandemia había impuesto en estos anteriores años, se recuperará la forma tradicional de desarrollar esta carrera y el ramo de flores volverá a pasar de mano en mano desde Valladolid hasta El Henar, portado por los corredores que van a participar en esta sexagésimo cuarta edición

Quedan atrás los primeros años en los que muy pocos corredores participaban en la carrera- 7 en los dos primeros años y 12 en el tercero- algo que visto ahora supone una verdadera hazaña. Las progresivas incorporaciones a la carrera de atletas de los “Luises”, colegio de San José, Universidad de Valladolid, Dominicos de Arcas Reales y su Club DAR, Club de Atletismo Valladolid-Tintoretto y Club de Atletismo La Milagrosa han ido consolidando y asegurando el futuro de esta muestra deportiva.

El paso de los años ha hecho que la carrera se haya ido estructurando en torno a las familias que han ido creando los participantes a lo largo de sus años de existencia, y que son los que actualmente aportan los corredores necesarios para desarrollarla en cada edición, aunque la carrera siempre está abierta a todos los que deseen integrarse en ella.

La salida de la carrera está prevista para las 9.00 de la mañana desde la parroquia de La Milagrosa en la calle Algeciras esquina a Huelva, y la llegada al Santuario de El Henar se prevé alrededor de las 13.00 horas.

Las calles vallisoletanas del barrio de Las Delicias y la carretera de Segovia (en sus vías de servicio), volverán a ver a los cerca de 50 corredores que participarán en esta edición de la carrera.

Padres, hijos y nietos van a volver a unir deporte y oración en esta peculiar y única manifestación deportiva que se desarrolla entre Valladolid y Segovia. Los relevos del ramo de flores se harán en los núcleos de población que atraviesa la carrera: Herrera de Duero, Aldeamayor de San Martín, Arrabal de Portillo, Santiago del Arroyo, San Miguel del Arroyo y Viloria, donde anualmente premian con sus aplausos el esfuerzo de los corredores.