La fuente del Cirio será el punto de partida del recorrido procesional. | Foto: Nuria Pascual |
A falta de 15 días para que la Puerta Santa del Santuario de El Henar se abra a la celebración del Año Jubilar Henarense, el programa de los actos inaugurales del 8 de agosto ha tenido que ser modificado a causa de la evolución de la pandemia de covid-19. Así se puso de manifiesto ayer durante el desarrollo de la Junta de Seguridad del evento que tuvo lugar en la Subdelegación de Gobierno y a la que también asistieron por videoconferencia el vicepresidente de la Diputación, el diputado del área de Infraestructuras, la secretaria territorial de la Junta en Segovia, responsables de la Guardia Civil de Tráfico y de la Jefatura Provincial, del Ayuntamiento de Cuéllar, el teniente coronel de la Guardia Civil, el jefe de la Policía Local de Cuéllar y representantes la Guardia Civil de la villa.
En el encuentro se abordaron varios temas, aunque no se definió el dispositivo de seguridad que se establecerá finalmente para esa jornada inaugural, ya que según señaló el rector del Santuario, Carlos García faltan conversaciones con la Guardia Civil de Cuéllar, con responsables de Sanidad y con Protección Civil para definir cómo se controlarán los diferentes espacios del recinto del Santuario.
En cuanto a los cambios en los actos inaugurales del Año Jubilar se mantendrá el recorrido procesional a las 18.30 horas desde la fuente del Cirio hasta el Santuario donde se llevará a cabo la apertura de la Puerta Santa. La misa cuya celebración estaba prevista en la parte posterior del Santuario, al aire libre, se trasladará al interior del templo donde se mantendrá un aforo reducido marcando los lugares que podrán ser ocupados en los bancos. La megafonía existente en el recinto permitirá que la misa pueda seguirse desde el exterior donde se podrán instalar 300 o 400 sillas con la distancia que marca la normativa, para que los fieles puedan seguir la misa. Del mismo modo en la pradera también se podrá seguir cumpliendo las normativas vigentes. Todo estos se perfilará junto a las fuerzas de Seguridad y sanidad en los próximos días
El rector manifestó que los cambios se llevan a cabo “por un criterio de prudencia, dadas las circunstancias actuales y cómo se está desarrollando la subida de contagios, el nivel de alerta y las nuevas normas, que en principio son hasta el día 2, pero todo hace pensar que se prorroguen”.
Inicialmente la misa, que se iba a celebrar en el exterior, preveía acoger a unas 1.000 personas en un espacio acotado, cifra máxima que permite la normativa en estos momentos, si bien han preferido que prime la prudencia ya que podrían ser muchas más las personas que se acerquen hasta el Santuario ese día y “se nos puede ir de las manos”, afirmó.
En la procesión no se portará la imagen de la virgen ya que se plantea como un recorrido de acceso a la misa cambiando la sacristía como punto de partida, por la fuente del Cirio, al ser este el punto en el que se apareció la virgen. En él se contará con los obispos, sacerdotes, y quizá también las autoridades que asistan, aunque aún está por definir. Aquellos que quieran presenciarlo, deberán hacerlo sentados, de acuerdo con la normativa sanitaria actual.
El acceso al templo podría controlarse con el reparto de entradas gratuitas que permitirían controlar los asistentes. Esto está aún en estudio y de decidirse a llevarlo a cabo se dará a conocer para que los interesados puedan recoger sus entradas.
