El conjunto cuellarano plantó cara durante los primeros veinte minutos

|Por Daniel Martín| Fotos: Gabriel Gómez|

La Gimnástica Segoviana se llevó el Trofeo Drin Seguridad en Cuéllar tras doblegar al equipo rival que plantó batalla en el inicio del choque, pero que se fue diluyendo cual azucarillo al poderío del conjunto de la capital. Los de Santi Sedano mostraron de nuevo una buena imagen logrando un triunfo solvente a dos semanas del inicio liguero.

Desde el inicio el conjunto gimnástico se hizo con el dominio del choque y a pesar de no generar ocasiones triangulaba en campo contrario. La movilidad de Kike y de Dani Arribas servía para generar acciones de peligro, pero no conseguían inquietar al meta Rober.

Por su parte el Cuéllar Eufón aguantaba bien posicionado en el campo, y defendiéndose bien de todas las llegadas rivales. E incluso iba a gozar de una buena ocasión con un lanzamiento de falta de Juli que golpeaba en la barrera.

La defensa numantina del Cuéllar iba a mostrar fragilidad al llegar al minuto 20 de partido. En un córner, Kike remataba a placer abriendo el marcador. A partir de ahí empezaron a llegar con más claridad, pero unas veces el desacierto en el remate y en otras el acierto del meta italiano Rober, eran motivos suficientes para que el marcador siguiese igual.

Antes del descanso la Gimnástica materializaba su dominio con dos nuevos tantos. Primero Dani Calleja se encontraba con una buena intervención del meta, pero el rechace lo cogía Dani Arribas que de potente disparo batía al arquero cuellarano. El meta Rober, y el palo evitarían después el doblete de Dani Arribas. Justo con el tiempo cumplido Dani Calleja lanzaba de manera magistral una falta para hacer el 0-3.

En la segunda mitad el Cuéllar salió dispuesto a pelear la segunda mitad, ajeno al resultado, y consiguieron triangular rápidas acciones, aunque no inquietaron al meta Facundo. La Segoviana iba a aumentar la renta gracias a la conexión granjeña, Kike asistía y Ricar remataba batiendo a Ernesto.

El partido se convirtió en un carrusel de cambios, y también de imprecisiones, en un partido ya resuelto, pero entretenido para el espectador. En una acción aislada, Javi recibía en el área y batía a Ernesto, que poco podía hacer para detener el lanzamiento.