| Los festejos tuvieron lugar en la localidad de San Miguel del Arroyo |


| Fotos: Gabriel Gómez |

La localidad vallisoletana de San Miguel del Arroyo acogió ayer la celebración de la Fiesta de la Comunidad de Villa y Tierra de Cuéllar. Una jornada marcada por el intenso calor, que sin embargo no mermó el ánimo de los vecinos de los 36 municipios que formar la Comunidad para reunirse.

Los actos comenzaron con una recepción a las puertas del Ayuntamiento en la que los representantes de los municipios, algunos de ellos que acudían por primera vez a un acto de la Comunidad tras las recientes elecciones, tuvieron ocasión de saludarse y charlar. Seguidamente el salón de plenos del Ayuntamiento acogió el acto de bienvenida por parte del alcalde de la localidad, José Arenal, y por  el presidente saliente de la Comunidad, Jesús García, el entrante y alcalde de Cuéllar, Carlos Fraile, así como otros representantes de la Corporación de San Miguel del Arroyo y la gerente de la Comunidad, Elena García. Arenal manifestó su deseo de que los participantes en la fiesta pasaran una jornada agradable. “Empezamos una nueva legislatura y hemos tenido la suerte aquí en san Miguel del Arroyo de empezarla con una fiesta”. Destacó también el valor  de la Comunidad y como ha ido evolucionando desde su creación con la prestación de buenos servicios a sus vecinos como el de bomberos para la extinción de incendios, la maquinaria para el arreglo de caminos… Animó también a que se puedan crear nuevo servicios o potenciar los que se prestan.

Jesús García, presidente de la Comunidad los últimos 12 años, agradeció la colaboración que  en estos años han tenido todos los municipios han prestado, así como su apoyo en las decisiones adoptadas. Recordó que “pasamos situaciones muy complejas dentro de la Comunidad. Hubo una descapitalización total de sus recursos y unos años en que la madera dejo de valer”. Asímismo el polígono perdió con la crisis de 2007 parte de sus empresas. Después se produjo ya “la recuperación del sector de la madera y los nuevos contratos de alquiler de las naves” y resurgieron  los recursos de  la entidad que tienen su base en los alquileres de las naves, las resinas y las maderas.

García afirmó que la situación de la entidad está ahora saneada con una previsión de inversiones importante que incluye la conclusión de la obra de su sede, la casa del secretario, y la puesta en marcha de una depuradora en el polígono de su propiedad para cumplir con las exigencias de la Confederación Hidrográfica del Duero que supondrá una inversión de más de 200.000 euros. Apoyo también la petición de Arenal de en la medida de los posible que la Comunidad pueda incrementar sus servicios a los municipios.

Carlos Fraile, nuevo presidente de la Comunidad, se mostró “encantado” de casi iniciar su andadura en esa fiesta que le ofreció la posibilidad de conocer y saludar a los representantes de otros municipios. “En la Comunidad de Villa y Tierra vamos a seguir trabajando por los pueblos, por la gente que vive en ellos”, afirmó añadiendo “yo también entiendo la Comunidad como un ente prestador de servicios para todos los vecinos y desde la colaboración y el consenso dispuesto a trabajar”.

La gerente de la Comunidad, Elena García, señaló que ahora  la Comunidad vive un buen momento y puso de relieve la “diversidad de los pueblos” que la integran tanto de Segovia como de Valladolid. “La principal fuerza está en esa diversidad que nos reúne, en las posibilidades que no estén cubiertas a través de otras mancomunidades nosotros podemos tener la opción de llegar”, afirmó. “En estos pueblos cualquier grano de arena, cualquier comodidad contribuye a mejorar bastante la calidad de vida de los vecinos”, dijo.

El salón de plenos acogía también la exposición de pintura de Inocencio Poladura, miembro de la Asociación de sordociegos de Castilla y León, ASOCYL.

 

Concurso de tortillas

Tras las intervenciones se llevó a cabo la  valoración por parte del jurado de las tortillas participantes en el concurso convocado. En total se presentaron siete y la ganadora fue la elaborada  por Abel Íscar con patata, huevos y cebolla entre sus ingredientes y dos horas de elaboración. El segundo puesto fue para la realizada por Gonzalo Antorán y el tercero para la más original, la cocinada por Montserrat Diéguez que a los ingredientes tradicionales como la patata, la cebolla y los huevos les añadió calabacín, colmenillas y sésamo.

Tras la entrega de premios las tortillas se ofrecieron a los vecinos de la Comunidad que se congregaron en la plaza, acompañadas de limonada y también pastas. Después los actos se desplazaron al parque donde se prepararon las paellas, en total para más de 500 personas, y donde los asistentes pudieron disfrutar también al final de la tarde del concierto de La Banda Olivetti.

Los más pequeños tuvieron también su espacio con hinchables con agua y un rocódromo junto al Ayuntamiento.