| Destacan que se cuenta con una sola enfermera para 1.400 tarjetas sanitarias infantiles |
El Sindicato de Enfermería, SATSE, de Segovia ha pedido a la Gerencia de Asistencia Sanitaria de la provincia un aumento de la plantilla del Centro de Salud de Cuéllar para que cuente con tres enfermeras más. Con ellas señalan que se cumpliría la unidad básica funcional un médico-una enfermera y disminuiría la presión asistencial que ahora padecen las profesionales del centro.
SATSE Segovia también ha insistido en la necesidad de que la paridad médico-enfermera se cumpla en todos los centros de salud de la provincia, a la vez que deben cubrirse inmediatamente las incidencias que surjan en todos ellos por bajas, permisos, etc., de enfermeras y enfermeros, algo que recientemente no sucede en centros de salud como el de Nava de la Asunción, entre otros.
El sindicato ha enviado un escrito al gerente de Asistencia Sanitaria de Segovia en el que refleja que el Centro de Salud de Cuéllar tiene asignadas 13.188 tarjetas sanitarias de pacientes (TIS), de las que 7.283 pertenecen al propio núcleo urbano.
Asímismo, el centro cuenta con siete médicos y solo cinco enfermeras. Cada una de ellas asume, solo del núcleo urbano, la asistencia de unas 1.450 tarjetas sanitarias, mientras que a cada médico le corresponden unas 1.040.
Además, las enfermeras tienen asignados pacientes de diferentes cupos médicos, “con las dificultades organizativas que ello conlleva y la pérdida de calidad en la atención a los usuarios”, según señalan. Así, añaden que el trabajo de las enfermeras también incluye la atención domiciliaria de pacientes inmovilizados, la atención a crónicos, cuya prevalencia es muy elevada en esta zona básica de salud, extracciones, espirometrías, ECG, gestión a la demanda… “y todo ello se traduce en una presión asistencial muy elevada”.
Una enfermera en pediatría
SATSE también afirma que en el centro de salud existen, además, dos cupos de pediatría que tienen asignadas unas 700 tarjetas cada uno, pero solo hay una enfermera que debe asumir la asistencia a esas 1.400 tarjetas sanitarias de población infantil.
“Esto supone que una parte importante del programa del niño sano tenga que ser asumido por los pediatras, pudiéndose en ocasiones incrementar los tiempos de espera para obtener cita para una consulta médica a demanda”, sostiene el sindicato.
También subrayan que la postura de la Gerencia Regional de Salud es alcanzar la unidad básica funcional médico-enfermera, tal y como quedó plasmado en el acuerdo firmado por SATSE y el consejero de Sanidad el 20 de marzo de 2023, “ya que el objetivo de nuestro sistema de salud es avanzar en la calidad de los cuidados prestados a los pacientes de la comunidad”, añaden.