| El Santuario ha abierto sus puertas de madrugada para recibir a los romeros que han acudido andando |

| La pradera ha sido lugar de encuentro y reunión de familias y amigos | 

| Fotos: Gabriel Gómez y Nuria Pascual | 

Como cada domingo anterior a San Mateo el Santuario de El Henar vive hoy su día grande con la celebración de la festividad de la virgen, una festividad que conmemora su 400 aniversario desde que fue concedida por el Papa Gregorio XV en 1621, hecho que ha hecho al Santuario merecedor del Año Jubilar Henarense. Una celebración que dio comienzo el 8 de agosto y que se prolongará hasta el 22 de septiembre de 2022 sumándose a la celebración del 50 aniversario de la coronación canónica de la imagen.

A  las 5 de la mañana el Santuario abría sus puertas para recibir a un grupo de romeros que llegaban desde Quintanilla de Onésimo (Valladolid). En total unas 40 personas que acuden cada año y que en su camino hacia el Santuario hacen dos paradas, la primera en Cogeces del Monte y la segunda en Torrescárcela. Entre esos romeros han caminado Vanesa Nielfa y su madre quienes en días pasados donaron a la virgen un nuevo manto blanco, que ha lucido durante las novenas, y que en su caminar han trasladado en esta ocasión otro manto para la imagen de El Henar, de terciopelo negro bordado a mano en oro, que de manera simbólica han ofrecido a la imagen a primera hora de la mañana, aunque después han vuelto a hacerlo en la misa mayor.

Hasta el Santuario han llegado muchos más romeros desde la comarca caminando, en bicicleta y en sus vehículos, y la pradera se ha llenado de familias y grupos de amigos que cumpliendo con la tradición han elegido el recinto en este día para comer.

A las 8.00 horas comenzaban las misas que se suceden durante todo el día. Su punto álgido ha sido a las 12.00 horas con la celebración de la misa mayor que este año tampoco se ha desarrollado en la pradera, como es habitual en  esta festividad, sino que ha tenido lugar en el interior del templo y oficiada por el Obispo de Segovia, César Franco, y concelebrada con el rector del Santuario, Carlos García, el párroco de Cuéllar, Fernando Mateo, el padre agustino, Ismael Arevalillo, y el ecónomo de la diócesis, Rafael de Arcos.

Franco ha saludado a los vecinos de Quintanilla que han peregrinado hasta el Santuario y a los que han llegado desde otros puntos para venerar a la imagen de la virgen. En su homilía ha manifestado que este Año Jubilar que se vive, y que fue concedido por la Santa Sede, “es para que crezca la fe de nuestro pueblo”. Ha señalado que hoy el Santuario se encontraba lleno “pero las iglesias están cada vez más vacías”. Así ha cuestionado “¿qué pasa con la fe de las familias, los niños, los matrimonios…?”. Se ha referido también a una “cultura dominante, invasiva que entra en los hogares y mina los fundamentos de la fe”.

“Que la virgen de El Henar nos ayude a vivir una fe comprometida, misionera y responsable”, ha deseado el Obispo.

Las ofrendas a la virgen se han abierto con la de las vecinas de Quintanilla con el manto para la virgen que han extendido y mostrado a los asistentes. Un manto que concluida la misa el rector ha detallado que lo vestirá la virgen en noviembre, mes de los difuntos.

La comunión se ha ofrecido a los que  asistían a misa en el interior del templo, pero también a los que la seguían en el exterior.

La misa ha concluido con vivas a la virgen del Henar y a la morenita seguidos de un sonoro y prolongado aplausoy el canto de la salve.

Las nuevas tecnologías han permitido acercar  a la virgen a aquellos devotos que se encuentran lejos y que muestran su agradecimiento por poder ver a la imagen.

Las misas continuarán esta tarde a las 18.00 y a las 19.00 horas, y las confesiones pueden realizarse durante las misas y tras ellas.

 

Camarín

Los devotos pueden también visitar a la imagen en su camarín durante todo el día. Los voluntarios se encargan de controlar los aforos tanto allí como en el templo

La virgen viste hoy uno de sus mantos más antiguos y porta el bastón de mando como alcaldesa mayor de la Comunidad de Villa y Tierra de Cuéllar. Asímismo en su manto luce en un lateral la medalla de la Diputación Provincial y en el otro la insignia de su coronación canónica en 1972.

Aunque solo había un puesto de venta frente al Santuario, no han faltado este año las avellanas, las almendras garrapiñadas y las obleas.