Apeadero de autobuses de Cuéllar. | Foto: Gabriel Gómez Galicia |
Si en el pleno de diciembre el edil de Centrados, Borja Sanz, ponía la atención en la parada de autobuses junto a la rotonda del Castillo solicitando su reserva de 8.00 a 22.00 horas para autobuses, en el pleno de la pasada semana se hacía eco de las quejas de los vecinos sobre el apeadero de autobuses en la calle Bartolomé de la Cueva. Sanz solicitaba “el estudio para una reforma urgente” del mismo.
Entre las carencias e inconvenientes que, a su juicio, presenta este apeadero, Sanz apuntó que los vecinos de la villa destacan: la falta de cobijo ante las inclemencias meteorológicas. Esto hace que las personas tengan que esperar el autobús en plena calle, “pasando frío en invierno y calor en verano” y la falta de información y asistencia, “al no haber oficina de venta de billetes ni nadie que atienda e informe a los pasajeros sobre horarios, precios y frecuencias”. También reseñó que el acceso a los baños debe realizarse desde el bar, permaneciendo cerrados cuando este no está abierto.
Desde Centrados solicitan “acciones urgentes al Ayuntamiento de Cuéllar en busca del bienestar de nuestros vecinos”. Así consideran que la solución pasa por reabrir la sala de espera por lo que invitan al Ayuntamiento a reunirse con la empresa explotadora lo antes posible para llegar a un acuerdo que permita dicha reapertura. “Creemos que es un problema de fácil solución y escaso coste económico”, concluyó el edil.
El alcalde, Carlos Fraile, señaló que se trata de un problema que se lleva tiempo produciendo. Afirmó que darán una vuelta al asunto e instó a Sanz a comentarle el asunto de manera más detallada y se comprometió a hablar con el gerente de la empresa concesionaria de la línea Segovia-Valladolid.
