Gran partido del FS Cuéllar que se supo sobreponer a todo tipo de adversidades para llevar al límite al campeón de liga, que tuvo que sudar tinta para mantener su racha inmaculada como local. Como viene siendo habitual en la segunda vuelta los árbitros perjudicaron seriamente a los de Antonio González.
Cuellaranos y zamoranos ofrecieron un gran partido con fases de dominio alterno en el que las defensas y los porteros evitaron goles cantados. Antes del inicio el FS Mariano Rico Cuéllar hizo el pasillo de campeón al Intersala Zamora.
Los problemas para el conjunto de Antonio González comenzaron ya en el viaje hasta la capital del Duero ya que Abel se sintió indispuesto y no pudo actuar en el partido.
El partido empezó de la peor manera posible para los visitantes ya que a los diez segundos del pitido inicial una falta de entendimiento entre la defensa y el portero terminaba con gol en propia puerta. Para más inri Piti se lesionaba antes de cumplirse el primer minuto de juego.
A pesar de los golpes recibidos, los cuellaranos no los acusaron tanto como se podía esperar y aunque durante los primeros cinco minutos el dominio correspondió al Intersala, pasado ese tiempo fueron capaces de ir poco a poco nivelando el choque.
David tenía la primera clara de los visitantes con un remate al segundo palo despejado por Manu en el minuto 6. A partir de aquí se sucedieron las ocasiones en las dos porterías. Rubén sacaba dos remates por bajo muy peligrosos desde la frontal y Manu ganaba el mano a mano a renglón seguido. Las jugadas a balón parado de ambas escuadras tenían protagonismo en ataque pero sin llegar a convertir ninguna.
Con el paso de los minutos el Mariano Rico se fue haciendo mayor dominador del choque aunque sin poder aprovechar alguna de las ocasiones generadas. Lo que sí consiguieron fue que Intersala se cargara de faltas poco a poco, llegando a la quinta acumulativa restando dos minutos y medio para el final del primer acto. En ese momento, Chema Sánchez optó por poner el portero-jugador con la intención de mantener la posesión, sobre todo en su campo, y sin apenas buscar el marco rival.
El tiempo corrió rápidamente, a pesar de que los visitantes intentaron robar algún balón, la posesión fue prácticamente total de los locales, por lo que se llegaba al descanso con el 1-0.
Segunda parte
En la reanudación el encuentro continuó con el mismo guion: choque equilibrado en el que los visitantes tenían mayor control pero ahora no llegaban con tanta facilidad a la meta de García. En el 24 Pablo salvaba la más clara de los cuellaranos hasta el momento, tocando el balón lo suficiente para que no llegara David en boca de gol.
Aprovechando el desgaste físico visitante los zamoranos empezaron a crear peligro con dos oportunidades desbaratadas por Rubén. También lo intentaron con varios disparos lejanos con mucha intención detenidos por el meta cuellarano. Javi en el 25 y 26 disponía de dos mano a mano con García en los que el portero zamorano logró achicar bien el espacio.
El partido era de mucha intensidad por ambos pero sin malas acciones. En el 27 David cortaba un avance local y varios jugadores locales se fueron a recriminar la acción, a lo que David respondió separando con los brazos al que más cerca tenía por lo que vio la tarjeta
amarilla.
La sorpresa llegó instantes después cuando el otro colegiado le mostró la tarjeta roja por una supuesta agresión, algo que no sucedió pero que, por segunda vez esta temporada este colegiado se inventa una acción inexistente para expulsar a un jugador del Mariano Rico. Este hecho cambió un arbitraje que hasta ese momento no había tenido influencia en el marcador. Con inferioridad en la pista Intersala lograba el 2-0 en el 28.
No bajó los brazos el conjunto de Antonio González que en un alarde de superación se fue en busca de reducir diferencias aunque solo dos minutos más tarde Davicillo se resintió del tobillo y tuvo que retirarse aunque sí pudo continuar aunque no al cien por cien. Con apenas dos cambios los cuellaranos tiraron de orgullo, presionando bien la salida de balón rival y evitando que los zamoranos estuvieran cómodos sobre la pista.
Restando casi siete minutos para el final el visitante Pablo veía la amarilla por cortar un avance de Carlos y en las protestas los árbitros le mostraban la segunda amarilla y la consiguiente expulsión. Al principio del cuatro para tres los cuellaranos no fueron capaces de superar la buena defensa local por lo que el entrenador visitante pidió tiempo muerto para aclarar ideas, lo que dió sus frutos en el 35 con el 2-1 de Tomás.
El Mariano Rico siguió buscando el empate y a falta de cuatro minutos puso en pista el portero-jugador. Con esta táctica García se convirtió en el salvador de su equipo al sacar un remate de Tomás y otro de Javi muy claros. La última ocasión del partido fue un disparo de Chuki que García y la defensa lograban despejar para terminar con el 2-1.
Antonio González se mostraba orgulloso del partido de su equipo, a pesar de la derrota, ya que habían tenido contra las cuerdas al campeón de liga, siendo capaces de superar todas las adversidades que se les fueron planteando, que no fueron pocas. También quiso reconocer el gran trabajo de todos los jugadores que se dejaron hasta la última gota de energía.
El próximo sábado a las 18:30 horas el FS Mariano Rico Cuéllar recibirá al Universidad de Valladolid, en lo que será la última jornada de liga.
