El representante de la ganadería gaditana Lagunajanda, Salvador de la Puerta, y el diestro madrileño David Mora pusieron el colofón a las Jornadas de la Peña Taurina El Encierro. “El indulto de Orégano. Del encierro a la plaza” fue el título que le dieron a este encuentro con el responsable de la ganadería del primer toro indultado en el coso cuellarano y con el torero que lo lidió, y que estuvo moderado por Francisco Salamanca.

De la Puerta aseguró que su ganadería es el resultado del trabajo de muchos apasionados por el toro. Así señaló que es el trabajo de todo un equipo que incluye a su familia, al mayoral, a los vaqueros. Una ganadería que ha evolucionado manteniendo unos criterios firmes, buscando raza, bravura, y franqueza en los astados.

David Mora señaló que el de la villa fue su octavo  indulto desde que tomó la alternativa hace una década. “Indultar es la mayor satisfacción de los toreros”, afirmó siempre que se realice con criterios serios. Sobre Orégano recordó que fue un astado que salió metiendo la cara, algo que considero fundamental. A juicio de Mora el encierro puede contribuir a que los toros se desestresen para la corrida, pero si pueden verse afectados por el recorrido aunque aseguró que se trata de una tradición “y el que viene a Cuéllar o va a Pamplona debe saber de la circunstancia que hay y la tradición”, afirmó.

De la Puerta señaló que  Orégano se encuentra “felizmente encerrado” con unas pocas vacas. Aseguró que la calidad del toro se ve cuando tiene un comportamiento homogéneo y ya desde el caballo señala cómo será la faena de muleta. “Un toro que tenga una buena y entregada lucha en varas casi seguro que va a  ser bueno en la muleta”, aseguró.

Ambos coincidieron en la importancia de los medios de comunicación para que la fiesta llegue a los hogares y se de a conocer a la juventud. “Los toreros deben ser una referencia para la juventud porque encarnan unos valores, afrontan las dificultades, las lesiones, cornadas…” dijo el ganadero.

De la Puerta explicó como con la crisis han reducido sus vacas a la mitad contando en la actualidad con unas 160, lo que les ha permitido en tres o cuatro años tener una selección del ganado que de otro modo no hubieran alcanzado en una década. La ganadería licia dos novilladas y cuatro o cinco corridas cada año, según apuntó.

Mora espera terminar este año la temporada como la anterior y poder mejorar en plazas como la de Sevilla atravesando la Puerta del Príncipe. El matador señaló sentirse bien físicamente y recuperado de la cogida que sufrió en 2014, de decir lo contrario aseguró que “sería injusto con la vida y con Dios”. Afirmó que continúa trabajando con el preparador para fortalecer su pierna y especialmente el cuádriceps que es lo que le ha quedado más afectado.

Ambos ponentes destacaron la afición existente en Cuéllar y el ambiente que se genera en el municipio, y se mostraron dispuestos a repetir si el Ayuntamiento así lo considera.

El acto se cerró con la entrega de un pañuelo y la insignia de la peña a los ponentes y al ganadero del Trofeo al Toro Bravo que la Peña concedió a Orégano.