|Los poetas tienen tres minutos para recitar y los textos deben ser propios |

|La poeta representará a Aragón en la final nacional en 2022 |

|Fotos: Sandra Lario| 

La cuellarana Sara Balporte ha sido la ganadora del Altercado Slam de poesía de Zaragoza, iniciativa artística de la Asociación Cultural Noches de Poemia. Una slam es una competición poética a dos rondas en la que sus participantes recitan versos de creación propia y un jurado compuesto por el propio público los puntúa  escribiendo sus puntuaciones en pizarras, puntuando del 1 al 10.

Balporte, que lleva un año residiendo en Zaragoza, señala que hasta que llegó allí no conocía este formato de competiciones de poesía recitada, `poetry slam´. Unas competiciones que detalla se desarrollan a nivel internacional. “Las ciudades de España que tienen este tipo de competiciones, que actualmente son 30, eligen a su representante que después compite en la final nacional”, explica. El ganador nacional participa anualmente en la fase internacional. Ella se ha clasificado para la undécima edición nacional que se desarrollará en 2022, en la que representará a Aragón.

Los poetas tienen tres minutos para recitar y los textos deben ser propios, y que no se hayan defendido en una slam anteriormente.

En cada clasificación se dan cita una media de ocho poetas o `slammers´, diez como máximo, y tras sus exposiciones el público vota y los tres con mejor puntuación pasan a la segunda ronda, según explica la poeta cuellarana. En la segunda ronda defienden otro poema y el que logra mejor puntuación es el ganador.

Sara se inscribió en Zaragoza a comienzos de año y ganó aquella primera ronda que le dio un puesto en la final que se disputó el sábado 2 de octubre. A esa final acudió con dos poemas en los que son patentes sus raíces segovianas, “siempre en los poemas que he defendido hago alusión a los campos de Castilla a Machado, a Espronceda, a nuestra reina Isabel…” algo que señala que une con  esa generación `millennial´ a la que pertenece creando un dúo que la ha hecho ganadora del slam, y de las dos pruebas clasificatorias de esa final.

El primer poema que defendió la cuellarana se titulaba `Matria´ y trata sobre los pueblos de Castilla, y el de la final `La vida siempre puede vencer´ y es un poema  al que la autora añadió “estratégicamente” versos en catalán, en gallego y en euskera, “es una llamada a la unión de los pueblos”.(*Léela al final de la noticia)

Aún está por determinar cuándo y dónde será la final nacional de 2022 a la que la autora acudirá con mucha ilusión y con sus orígenes segovianos por bandera.

Balporte confía en que pronto Segovia cuente con una competición de poesía de estas características que ya disfrutan otras ciudades de la región como Valladolid, Salamanca, León o Burgos.


`La vida siempre puede vencer´

¿Puede la vida vencer siempre?
¿Puede la voz mantenerse siempre inquebrantable?
¿Puede la naturaleza perdonarlo todo? ¿Acaso puede?

 

La respuesta baila en el silencio de todos.
¿Lo oyes?
Oreja protagonista del que no quiere oír.
¿Lo oyes?

 

Apaga la voz, el ruido, la luz que deslumbra dentro de ti, habla, vuélcame la mirada, quiéreme gorrión que vuela de la rama.
Pero antes, aún noto tu querer saber, tu querer luchar, tu sobrevivir.

 

Escucha y mira este país en el que ya suenan las alarmas del odio.

 

Alguien baje a Lorca, necesitamos escucharle decir:

 

Podrá el tiempo soplar el favor hasta tu orilla, océano de injusticia, ¡Qué probable eres! No hay condena, nombre, ni significante que te defina límites. En el mundo hoy, tu existir es innegable.

 

Hablo del odio que devora nuestras miradas, las del mismo pueblo,
las del madre, no nacimos para esto.
Las del madre, que nos matan.
Pero lagrimita de incendio y plata, creen que caímos con todo.
Pero guitarra gitana que llora
nos creen huyendo y no.
Alguien encuentre a Lorca y se lo rece. Se lo merece.

 

Escucha. Tengo miedo,
de esta tierra agresiva y doliente.
Tengo miedo, dame la mano,
beso de esperanza
toma mi futuro te lo lucho hoy.

Con bata blanca, corriendo en vitales, te lo lucho hoy.
Con pañuelo verde, gritando en las calles, te lo lucho hoy.
Con martillo y azada, trabajando mi tierra, te lo lucho hoy.
Con el fascismo verde, pisando mi puerta, te lo combato hoy.

 

Soy lo que estoy latiendo ahora. Seré lo que espera la espera de mí. Pero antes, sombra, color, pájaro en silencio durante días, muestra lo negro, la nada. Muestra lo que no se atreven a llamarnos todavía.
Nadie se mueve en esta sala planeta.
Nadie se mueve entre las filas de la no derrota.
Nadie se atreve a llamar a la trinidad de la lucha, cobardes:
los vencidos, los que perdimos, los ingobernables.

 

No es derrota. Y repito, no es derrota porque  Ni un paso atrás.
Ni un solo paso atrás. Hoy, no es derrota.

 

De entre todos los poemas, si aquí, en cuna de Aragón y con sangre de Castilla puedo armar a la palabra de pueblo, de memoria y de justicia diré:

 

Pot la vida vèncer sempre?
Pot la veu mantindre’s sempre infrangible?
Pot la natura perdonar-ho tot?
Si de cas, pot?

 

Pode a vida vencer sempre?
Pode a voz manterse sempre inquebrantable?
Pode a natureza perdoalo todo?
Acaso pode?

 

Bizitzak irabazi egiten du.
A vida sempre pode gañar.
La vida siempre, siempre, puede ganar.