Con unas jornadas en las que intervinieron varios ponentes, el Ayuntamiento de la villa celebró ayer el V Centenario de la Introducción de la Tauromaquia en América por Diego Velázquez de Cuéllar.
Más de una veintena de personas, la mayoría relacionadas con el mundo taurino, se dieron cita en la sala cultural Cronista Herrera para obtener de primera mano información sobre cómo llegaron las corridas de toros al otro lado del atlántico. La creencia de que fue de la mano del cuellarano Diego Velázquez respaldó la celebración de esta cita.
Tras la inauguración, Félix Martínez, Profesor de Historia del derecho de la Universidad de Valladolid, abrió las intervenciones con una sobre “Los festejos taurinos de Diego Velázquez de Cuéllar en la isla Juana, antigua Cuba (junio de 1514): una reconstrucción. Su objetivo era reconstruir lo que sería una corrida en aquella época. Martínez expuso su opinión de que aquella primera corrida tuvo lugar en la ciudad de Nuestra Señora Asunción de Baracoa, ya que era la única ya constituída y en la que ya se estaba preparando su establecimiento como diócesis.
Las Jornadas tuvieron lugar en la sala cultural Cronista Herrera.|Fotos: Gabriel Gómez|
Martínez afirmó que Diego Velázquez propició los festejos taurinos que él ya conocía bien aunque con la singularidad de los que se celebraban en tierras cuellaranas y de Castilla. Así afirmó que era tradición en la villa que se corrieran toros en el Corpus Christi y en la Octava del Corpus. Apuntó que según un documento fechado en junio de 1537 se celebraban en Cuéllar con toros el Corpus y San Juan.
El profesor Martínez señaló que los datos con que se cuenta hacen pensar que aquellos primeros festejos se realizaron siguiendo los parámetros que se seguían habitualmente en ellos en Castilla. Así señaló que el toro procedería de la zona sur de España, por la proximidad con el puerto de embarque. Los cosos se habilitaban con entramados y carros. Primero intervenían los caballeros y después el pueblo llano. Los hidalgos indicó que realizaban juegos con cañas y los caballeros eran los rejoneadores y portaban lanzas cortas o largas (simulando el actual rejón).
En otro sentido habló el siguiente ponente, Alberto Sauri, investigador cubano y licenciado en derecho quien se refirió a la “Transculturización y Tauromaquia en Cuba: de cómo los cuellaranos llevaron su cultura ancestral del toro a América”. Explicó que ese término de “transculturización” fue creado por el historiador Fernando Ortiz para referirse a lo que implica a la cultura hispana y africana en la cubana.
En contra de lo señalado por Martínez, Sauri fechó en 1515 y no en 1514 ese primer festejo en Cuba y lo situó en Santiago de Cuba y no en Baracoa. Sus argumentos se basaban en que 1514 fue un año fundacional en Cuba. Pánfilo de Narváez inició la fundación de villas acompañado por Fray Bartolomé de las Casas, quien no pudo estar en dos sitios a la vez, fundando villas en un punto y narrando lo sucedido en ese primer festejo en Baracoa. Estos datos le llevan a Sauri a concluir que fue en 1515.
Sauri enumeró los cosos taurinos que se construyeron en Cuba, antes de que en 1899 los festejos fueran prohibidos en la isla. Así en 1779 se contruyó la primera, en 1781 la segunda en Águila, en 1825 la tercera, en 1842 la del poblado de Regla, en 1853 la situada junto a la Casa de la Beneficencia, en 1866 se sustituyó la del poblado de Regla por una nueva, y en 1885 la situada en la Avenida Carlos III. la última antes de la prohibición de los festejos en la isla.
El abogado y ganadero, César Mata, habló después sobre “De España a América, el viaje de la bravura” y Alberto de Jesús, director de la revista Bous al Carrer intervino sobre “Festejos taurinos populares en América”.
Williams Cárdenas Rubio, presidente de la Asociación Internacional de Tauromaquia, cerró las intervenciones hablando sobre “La tauromaquia patrimonio universal” y la jornada concluyó con un coloquio moderado por Lorena Sancho, directora de la Revista La Talanquera.
