| Tras dos años sin poder celebrar el Rosario de Antorchas, la pradera volvió mostrar una bella imagen |
| Al final los devotos pudieron visitar a la virgen en su camarín |
Más de 250 velas rodearon ayer la pradera de El Henar en la Procesión de Antorchas celebrada en el marco del Año Jubilar Henarense.
El rector del Santuario, Carlos García, se dirigió a los devotos que ya en el exterior del templo esperaban el inicio del recorrido con sus velas encendidas, para darles la bienvenida. “Volvemos a reuniros, después de dos años sin celebrar esta bella y tradicional procesión de las antorchas para agasajar a nuestra madre con el rezo del santo rosario en este mes de octubre, mes del Rosario”, dijo García. Así recordó también que “han sido dos años muy duros, ninguno podíamos imaginar lo que tendríamos que vivir”, y recordó a los afectados por la enfermedad y a los que han fallecido por sus causa. “En esta tarde-noche vamos a poner a los pies de Nuestra Señora todo ese dolor, esa tristeza contenida que no hemos sabido sacar fuera de nosotros”, añadió. Recogió las intenciones de los asistentes para “elevarlas a lo alto, al cielo”, las intenciones de los que llegaban con dolor en el alma, de los que que tenían un trabajo inestable o insuficiente para sustentar a sus familias, de los que pedían por la salud de un ser querido o por un futuro matrimonio.
El recorrido en torno a la pradera discurrió con normalidad, precedido por la cruz y seguido por devotos de todas las edades portando sus velas. Unas velas que devolvieron al entorno del Santuario esa bella imagen que cada año regala el Rosario de Antorchas previo a la Romería de El Henar, una cita que ni en 2020 ni en 2021 ha podido celebrarse, debido a las medidas de la pandemia de COVID-19. La relajación de esas medidas permitió ayer que los devotos de la virgen, aunque en menor número que en la cita tradicional, pudieran mostrarle su afecto.
Al concluir el rosario el rector agradeció a los asistentes su devoción y a las autoridades municipales el haber facilitado que el rosario se pudiera desarrollar coordinando el corte de la carretera a su paso por el Santuario. Asímismo tuvo palabras de agradecimiento a las fuerzas del orden: Policía Local, Guardia Civil y protección Civil que velaron por el buen desarrollo de la actividad.
Vivas a la virgen de El Henar, a sus hijos y a los peregrinos que acuden cada año cerraron la procesión tras el tradicional canto de la Salve. Después se permitió a los devotos que pudieran visitar a la virgen en su camarín.