Quinto y último encierro de las fiestas de Cuéllar con las reses de la ganadería gaditana de Cebada Gago que han llegado con antelación a las calles de la villa.
Tan solo cinco reses componían el encierro ya que una fue descartada ayer por la organización. Se trataba del número 38 que tenía “una nube en un ojo y un varetazo no siendo apto”, tal y como informaron al Consejo Sectorial de fiestas.
La lluvia caída de madrugada ha reducido el polvo tanto en la suelta de los corrales del Cega como en la zona de El Embudo.
A las 8 de la mañana salían las reses de los corrales en una salida compacta y sin incidentes.
Dos de las reses han marcado el desarrollo del traslado por el campo, en concreto el toro castaño y el burraco. Este último antes del paso de las máquinas ha protagonizado arrancadas muy peligrosas a los caballos, mientras que el castaño ha sido el primero en cruzar el paso de Las Máquinas y la carretera de Cantalejo.
El toro burraco se ha integrado después en la manada mientras que el castaño ha continuado dando complicaciones. Agrupada la manada han realizado el paso por el túnel uno bajo la autovía y han continuado el camino de manera pausada, pero en la zona de los Encaños ya no ha sido posible parar a las reses por lo que han continuado camino hacia las calles de la villa las cinco reses junto a seis cabestros.
En el descenso uno de los toros se ha desviado, al parecer por un caballista, hacia el alto de El Embudo en su margen derecho, según ha indicado el alcalde, Carlos Fraile. Los caballistas han conseguido reconducir al astado hacia las calles con los bueyes de cola.
Ya en las calles la manada ha discurrido muy disgregada con arrancadas peligrosas para los corredores y constantes derrotes a las talanqueras que han generado constantes momentos de peligro.
Fraile ha señalado que el festejo ha estado “muy en la línea de lo que son los encierros de Cebada Gago”. El alcalde se ha hecho eco de los comentarios de corredores llegados desde Medina del Campo, Benavente o Pamplona “que han disfrutado, que han vivido el encierro con mucha intensidad y emoción”. También han destacado estos corredores que han disfrutado este año del tramo urbano “con toros con mucha fuerza, con emoción, que acometían”.
Enfermería
El encierro de hoy deja un varón de 81 años con una rotura de cadera al caer de la talanquera en la plaza de los Coches en una de las arremetidas de las reses.
Valoración
Fraile ha dicho que “la limitación de caballistas al menos ha servido para controlar mejor el encierro cuando la manada se ha partido, se ha disgregado y se ha podido trabajar mejor”. Ha añadido que tienen que continuar analizando todo lo sucedido ya que hay cuestiones de las que han tomado nota para comentar y mejorar.
Finalmente, el primer edil ha hecho un balance “más que positivo” de los encierros de este año, a falta del de San Miguel. “Se han encerrado 33 de las 36 reses”, ha dicho, recordando que hoy una no ha podido ser soltada y dos de Partido de Resina han tenido que ser anestesiados. “Una ganadería muy dura, muy complicada y que dio sus complejidades en el encierro y también en el coso taurino por la tarde”.
Colectivos
La Peña Taurina El Encierro destaca la buena presentación del ganado y la gran cantidad de público en los corrales. Señalan también lo disgregado que ha sido el encierro y los derrotes de los toros contra las talanqueras.
