El cuarto encierro del ciclo cuellarano con reses de la ganadería gaditana Núñez del Cuvillo Ha dejado dos heridos por asta de toro, con una cornada y un varetazo, alcanzados por una de las reses tras la salida de los corrales.
El traslado campestre ha vuelto a desarrollarse de manera dispar. La primera complicación surgía tras la salida de los corrales del Cega cuando dos de las reses se desviaban hacia la derecha, donde se ubican los coches, alcanzando una de ellas a algunas personas del público que allí se concentraba. Se han vivido momentos tensos en los que la gran cantidad de polvo ha creado mucha confusión y se reclamaba una ambulancia para atender a los heridos. La atención médica ha sido rápida y los heridos han sido trasladados a la enfermería de la plaza de toros donde han sido atendidos por el equipo médico.
El paso por el pinar y de las máquinas lo realizaban de manera rápida tres de las reses junto a algunos mansos y posteriormente llegaban las otras tres agrupadas por bueyes y caballistas. Al paso de la carretera de Cantalejo el encierro ha continuado dividido en dos, con las tres primeras reses controladas y las tres últimas que no conseguían parar y se desviaban hacia la zona alta.
Más adelante el trabajo de los caballistas ha hecho que esos astados pudieran reconducirse para agrupar la manada, si bien mansos y toros no han llegado a mezclarse en el recorrido hasta su descenso por El Embudo.
Las reses han llegado a las calles con la manada estirada y una de las reses se ha quedado rezagada en la calle Parras. Los corredores han podido disfrutar de bonitas carreras. y el trabajo de corredores y pastores ha hecho que la última res llegase a la plaza de toros.
El alcalde, Carlos Fraile, ha destacado que “pese a las polémicas previas los toros han cumplido y han servido para este encierro que no se va a lidiar”.
fraile ha insistido en la peligrosidad de la suelta desde los corrales del río Cega, con dos heridos. “Consideramos que se sigue espantando y citando ala manada desde más arriba de la puerta, no por las personas que se sitúan en la misma puerta”, ha manifestado.
Enfermería
La cirujana jefe, Marta Pérez, ha confirmado que se han producido dos heridos en la zona de corrales. El primero de ellos un joven de 28 años de Navacerrada que presentaba “una cornada en la cara anterior del muslo derecho que se iba hacia inferomedial y que ha destrozado el vasto anterior del cuadriceps”. Ha sido trasladado al hospital ya operado “para continuar los antibióticos endovenosos”.
El segundo herido es el cortador palentino, Christian Villegas, con un varetazo en el hemitórax derecho con fracturas costales asociadas. Pérez ha apuntado que se le ha derivado al hospital para que descartasen un neumotórax.
Ambos han viajado estables al Hospital General de Segovia.
Pérez ha señalado que han atendido también a algunas personas por caídas en el encierro urbano.
Colectivos
Desde la Asociación Encierros de Cuéllar señalan la presencia de caballistas con garrocha pero ataviados con chalecos “que en teoría no permiten llevarla”. Así mismo, se hacen eco de algunos comentarios que apuntan que los pastores obstaculizan a los corredores y cortadores en el tramo urbano al ponerse por delante de los bravos.
También se hacen eco del suceso en los corrales del Cega, así señalan que a su juicio en esa zona “hay gente que se echa demasiado encima del paso de la manada”.