| Proviene del Ademar León, con el que ha disputado varias temporadas en Asobal y competiciones europeas |

El Club Balonmano Nava ha anunciado su primer fichaje de cara a su nueva e histórica etapa en la Liga Asobal. Se trata de Rodrigo Pérez Arce, un joven central leonés de 178 centímetros y un importante palmarés. Nacido en octubre de 1995, empezó en el balonmano a los nueve años y se formó en la cantera del Ademar León, acudiendo a los campeonatos de España autonómicos y por clubes durante este periodo.

Finalizando su etapa en categorías base, fue convocado por la selección Española Junior para ir al Mundial de Brasil. A partir de entonces, empezó a formar parte del primer equipo del Ademar León, donde ha militado desde 2014 hasta 2019.

El central leonés ha sido cinco veces campeón de España en categorías inferiores, Internacional Junior, ha jugado la Copa EHF en la temporada 2016-2017 y la Champions League entre 2017 y 2019.

“Con ese palmarés a sus espaldas, Rodrigo quiere seguir creciendo como jugador, continuar mejorando y ayudarnos a conseguir el objetivo de la permanencia en la liga Asobal”, asegura el Club Balonmano Nava.

El nuevo jugador navero afirma: “El proyecto deportivo es ilusionante, está claro que es un proyecto para intentar consolidarse en la máxima categoría del balonmano español y poco a poco ir mirando hacia arriba. La afición de este equipo es espectacular, tuve la suerte o desventaja de sufrirla cuando era jugador del filial del Ademar León y venía a jugar contra Nava, el ambiente que se vive en el pabellón es difícil de encontrar incluso en la mayoría de canchas de Asobal, exceptuando el palacio de los deportes en León”.

Rodrigo Pérez se define por su versatilidad, capaz de jugar en cualquier puesto de la primera línea y adaptarse rápido a cada posición, con una gran capacidad de desborde en el uno contra uno, generando espacios y ocasiones de gol para el resto de compañeros.

“En la pista me gusta dirigir y generar un ritmo alto de juego, disfruto creando espacios para los compañeros, hasta ahora es en lo que se ha basado mi juego, además de mi desborde en el 1×1”, afirma.

Destaca la importancia de tener buena relación entre todos dentro del vestuario para conseguir los objetivos, “porque todo eso se nota después en la pista a la hora de jugar”. En ese sentido, le gusta compartir actividades fuera del campo con los compañeros, que ayuden a todos a tener buena relación.

Su primer objetivo colectivo, asegura, es el de la adaptación a la categoría lo más rápido posible, “el  equipo no tiene esa experiencia de la máxima categoría y los que sí la tenemos nos toca ayudar en lo máximo posible para ello”. El segundo, “disfrutar todos juntos de esta nueva experiencia de jugar en Asobal, a partir de ahí, lo más importante es luchar por la permanencia e intentar que se queden el máximo número de puntos posibles en nuestra casa”.