| Por Alberto Pérez Sacho  ||  Foto: Gabriel Gómez  |
El Viveros Herol Balonmano Nava se enfrenta al Atlético Novás hoy, sábado, a las 19:00 horas en el Pabellón Municipal de O Rosal, con la misión de cerrar el ascenso a la Liga ASOBAL.

Tan solo un punto tiene la culpa de que el Viveros Herol Balonmano Nava cumpla el sueño de jugar en la máxima categoría del balonmano español. Tras una temporada brillante, los pupilos de Daniel Gordo y Alejandro Pereira rozan con los dedos de las manos la meta.

Atrás quedan ya los numerosos obstáculos a los que ha hecho frente la plantilla. Desde la plaga de lesiones de la campaña pasada hasta la que asola al equipo en las últimas fechas, pasando por la mala suerte de Adrián Rosales y su lesión de larga duración producida al inicio de curso.

Pocos se acuerdan hoy de la agónica final por el ascenso ante Sinfín, donde un solo tanto privó a los Guerreros Naveros de alcanzar la gloria. Pero si para algo han servido esta serie de infortunios, ha sido para hacerlos aún más fuertes.

El rival no lo pondrá fácil, Atlético Novás se juega la vida. Los gallegos necesitan sumar de dos en dos si quieren salir de la zona de descenso. Para conseguir el objetivo, el contrincante sabe que tiene que hacer de O Rosal un auténtico fortín de donde no se escapen más puntos.

La empresa no será sencilla, pero todo hace indicar que si los blanquirrojos mantienen el nivel mostrando en los últimos encuentros, es muy probable que el Viveros Herol Balonmano Nava sea esta tarde, matemáticamente, equipo de ASOBAL.

Se espera que 240 aficionados naveros se desplacen para dejarse la garganta, una vez más, en el que puede ser el día más importante de la historia del club.

Un club, un pueblo, una afición.

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